[ fol. liij. ]

Capitulo treynta y ocho :
delo que suscedio alos demas que entraron en las indias.

P

Ues he hecho relacion de todo lo susodicho en el viaje y entrada y salida de la tierra hasta bolver a estos reynos : quiero assi mesmo hazer memoria y relacion de lo que hizieron los navios y la gente que en ellos quedo : de lo qual no he hecho memoria en lo dicho atras : porque nunca tuvimos noticia dellos hasta despues de salidos que hallamos mucha gente dellos en la nueva España, y otros aca en Castilla de quien supimos el successo y todo el fin dello de que manera passo. Despues que dexamos los tres navios, porque el otro era ya perdido en la costa brava : los quales quedavan a mucho peligro, y quedavan en ellos hasta cien personas con pocos mantenimientos. Entre los quales quedavan diez mugeres casadas : y una dellas avia dicho al governador muchas cosas que le acaescieron en el viaje antes que le suscediessen : y esta le dixo quando entrava por la tierra que no entrasse : porque ella creya que el ni ninguno de los que con el yvan no saldrian de la tierra : y que si alguno saliesse que haria dios por el muy grandes milagros, pero creya que fuessen pocos los que escapassen o no ningunos : y el governador entonces le respondio, que el y todos los que con el entravan yvan a pelear, y conquistar muchas y muy estrañas gentes y tierras. Y que tenia por muy cierto que conquistandolos [las] avian de morir muchos : pero aquellos que quedassen serian de buena ventura, y quedarian muy ricos, por la noticia que el tenia de la riqueza que en aquella tierra avia. Y dixole mas, que le rogava que ella le dixesse las cosas que avia dicho passadas y presentes quien se las avia dicho. Ella le respondio, y dixo que en Castilla una mora de Hornachos se lo avia dicho : lo qual antes que partiessemos de Castilla nos lo avia a nosotros dicho, y nos avia suscedido todo el viaje de la misma manera que ella nos avia dicho. Y despues de aver dexado el governador por su teniente y capitan de todos los navios y gente que alli dexava a Carvallo natu[ fol. liiij. ]ral de Cuenca de Huete, nosotros nos partimos dellos dexandoles el governador mandado que luego en todas maneras se recogiessen todos a los navios y siguiessen su viaje derecho la via del Panuco : y yendo siempre costeando la costa y buscando lo mejor que ellos pudiessen el puerto para que en hallandolo parassen en el y nos esperassen. En aquel tiempo que ellos se recogian en los navios, dizen que aquellas personas que alli estavan vieron y oyeron todos muy claramente como aquella muger dixo a las otras : que pues sus maridos entravan por la tierra adentro, y ponian sus personas en tan gran peligro no hiziessen en ninguna manera cuenta dellos : y que luego mirassen con quien se avian de casar, porque ella assi lo avia de hazer, y assi lo hizo, que ella y las demas se casaron y amancebaron con los que quedaron en los navios. Y despues de partidos de alli los navios hizieron vela y siguieron su viaje, y no hallaron el puerto adelante y bolvieron atras. Y cinco leguas mas abaxo de donde aviamos desembarcado hallaron el puerto que entrava siete o ocho leguas la tierra a dentro, y era el mismo que nosotros aviamos descubierto : a donde hallamos las caxas de Castilla que atras se ha dicho, a do estavan los cuerpos de los hombres muertos, los quales eran christianos. Y en este puerto y esta costa anduvieron los tres navios, y el otro que vino de la Havana, y el vergantin buscandonos cerca de un año : y como no nos hallaron fueronse a la nueva España. Este puerto que decimos es el mejor del mundo, y entra la tierra a dentro siete o ocho leguas : y tiene seys braças a la entrada : y cerca de tierra tiene cinco : y es lama el suelo del : y no ay mar dentro/ ni ormenta brava, que como los navios que cabran en el son muchos, tiene muy gran cantidad de pescado. Esta cien leguas de la Havana que es un pueblo de christianos en Cuba, y esta a norte Sur, con este pueblo : y aqui reynan las Brisas siempre, y van y vienen de una parte a otra en quatro dias : porque los navios van y vienen a quartel.
Y pues he dado relacion de los navios, sera bien que diga quien son y de que lugar destos reynos los que
nuestro señor fue servido de escapar destos trabajos. El primero es Alonso del Castillo Maldonado,
natural de Salamanca, hijo del doctor Castillo, y de doña Aldonça Maldonado. El segundo es
Andres Dorantes, hijo de Pablo Dorantes, natural de Bejar, y vezino de Gibraleon.
El tercero es Alvar nuñez cabeça de vaca, hijo de Francisco de Vera,
y nieto de Pedro de Vera el que gano a Canaria : y su Madre
se llamava Doña Teresa cabeça de vaca, natural
de Xerez de la frontera. El quarto se llama
Estevanico, es negro Alarabe
natural de Azamor.
Deo gracias,