Mi gusto y tu beldad se desposaron
Mi gusto y tu beldad se desposaron,
Terceros por mi mal mis ojos fueron:
Su logro ha sido tal, que, alfin, hicieron
Un hijo hermoso á quien amor llamaron.
Tan fuera de compás le regalaron,
Que cuando mas alegres estuvieron,
Sin entender el mal que produjeron,
Perdidos por amores se miraron.
La beldad desposada deste duelo,
Vino á parir un monstro con dós alas;
La madre es la soberbia, el niño el zelo.
Oh madre que á tu hijo en todo igualas!
Quien mortal hace al inmortal abuelo,
Y al padre mortal da inmortales zalas?