Memorial que hizo a su corazón, que parte al desconocimiento de su amiga donde él tiene todos sus sentidos

Memorial que hizo a su corazón, que parte al desconocimiento de su amiga donde él tiene todos sus sentidos
de Jorge Manrique



I

Allá verás mis sentidos,
corazón, si los buscares,
pienso que harto perdidos,
con gran sobra de pesares.
Envíame acá al oír,
porque mucho me conviene,
porque oiga de quien los tiene
algunas veces decir.


II

Allá está mi pensamiento,
allá mi poca alegría
que perdí en mi vencimiento,
y todo el bien que tenía.
Si tú los pudieres ver,
mucho me los encomienda;
mas cata que no lo entienda
la que los tiene en poder.


III

Allá está mi libertad
allá toda mi cordura;

tiénelo en cargo Bondad,
cautivolos Hermosura;
la portera es Honestad,
por lo cual nunca podrás
hablar con quien tú querrás,
si no buscas a Piedad.


IV

Mas está tan encerrada,
que si tú hablarla esperas
tal será la tu tornada
que antes que partas mueras.
Si no buscas algún arte
como hables con quien quieres,
cuanto en Piedad no esperes
alcanzar ninguna parte.


V

CABO

Y dirás a la señora
que tiene toda esa gente,
que soy presto toda hora
a su mandar y obediente;
y que es vuelto a mi servicio
un público vasallaje,
y mi fe en pleito homenaje,
y mi penar en oficio.