Los viajes de Marco Polo/Libro II/Capítulo XXII

Nota: Se respeta la ortografía original de la época

CAPITULO XXII.

PUENTE SOBRE EL PUSILANGHIN.

El gran Kan envió de embajador hácia Poniente á Marco Polo, quien viajó cuatro meses en dicha direccion. Hé aquí lo que vió.

Al salir de Cambalue se encuentra, despues de 10 millas de camino, un gran rio llamado Pulisanghin, que sigue hasta el Océano. Sobre el rio hay un magnífico puente de piedra, que no tiene igual en el mundo. Su largo es de 300 pasos, y su anchura de ocho.

Pueden pasar por él diez jinetes de frentey tiene veinticuatro arcos y veinticinco pilastras ó machones. Está hecho de mármol perfectamente labrado, y á cada lado hay unos contrafuertes de mármol, tambien labrado, sobre los que se sustentan las pilastras. En un extremo del puente hay una columna de la misma materia con un leon en lo alto, y sobre éste otro, mayor todavía, muy bien trabajado. A paso y medio del anterior hay otra enteramente igual, y entre lados una barandilla de mármol, para que los transeuntes no se caigan al rio: así hasta el otro cxtremo del puente.