Los diez libros de Diógenes Laercio: Diódoro

D I O D O R O.

1. Diodoro, hijo de Aminio, fue natural de Iaso, y también apodado Cronos, del cual dice Calímaco en sus epigramas:

Aun Momo escribía
en paredes y muros: «Crono es sabio.»

Era también dialéctico y, según algunos, inventó el modo de argumentar encubierto y cornuto. Hallándose en la corte de Tolomeo Sotero, como Estilpón le pusiese algunos argumentos de dialéctica, no pudiendo soltarlos de repente, le reprendió el rey sobre algunas causas, y por burla lo llamó Cronos. Salióse Diodoro del convite, y habiendo emprendido responder por escrito a las dificultades que Estilpón le había puesto, se abatió de ánimo, y acabó su vida. Mi epigrama a él es como se sigue:

¡Oh, tú, Diodoro Cronos!
¿Cuál demonio te indujo
a tanto abatimiento,
que al tártaro tú mismo te arrojaste?
¿,Fue por verte vencido, no pudiendo
responder de Estilpón a los enigmas?
Siendo así, con razón te llaman Cronos,
pues quitando C y R quedas Onos[1].

2. De la escuela de Euclides salieron también lctías, hijo de Metalo, varón noble, de quien Diógenes Cínico compuso un diálogo; Clinómaco Turio, que escribió de las Enunciaciones, Categorías y cosas semejantes; y Stilpón Megarense, filósofo celebérrimo, de quien vamos a tratar.


  1. Si de la palabra cronos se quitan las dos primeras letras c y r, queda onos, que en griego es asno. ¡Qué insulsez!