Los diez libros de Diógenes Laercio: Biante

BIANTE.

1 Biante, natural de Priena, hijo de Teutámo, fue preferido por Satiro entre los siete Sabios de Grecia. Se dice que fue rico. Duris afirma que fue advenedizo á Priena: y Fanódico, que habiendo rescatado ciertas doncellas Misenias que se hallaban cautivas, las sustentó como hijas, las dotó, y las remitio á sus padres á Misena. Poco despues, habiendo hallado en Atenas unos pescadores, como ya diximos, el Trípode de oro con la inscripcion: Para el mas sabio, dice Satiro, que las mismas doncellas salieron en publico, refirieron lo que por ellas habia hecho Biante, y lo aclamaron Sabio. Fuele enviado el Trípode: pero luego que lo vio, dixo, Apolo es el Sabio; y no lo admitio. Fanodico y otros dicen, que no fueron las doncellas quien aclamó Sabio á Biante, sino los padres de estas [1]. Otros dicen que consagró el Trípode á Hercules en Tebas, por ser oriundo de ella, y Priene su colonia: lo que afirma tambien Fanódico.

2 Refierese que teniendo Aliate cercada á Priena, engordó Biante dos mulos, y los introduxo en el Real del enemigo: vistos los quales, se marabilló mucho Aliate de que hasta los animales estuviesen tan lucidos en la Plaza; y meditando en levantar el cerco, envió á un hombre á ella para que observase su estado. Supolo Biante, y luego hizo muchos montones de arena, cubriolos de trigo, y los dexó ver al enviado: lo qual referido á Aliate, hizo paz con los Prieneses. Envió á llamar á Biante; mas este respondio: Yo mando á Aliate que coma ahora cebollas, esto es, que llore.

3 Dicese tambien, que fue un veementisimo Orador de Causas: pero siempre usó bien de su facundia. Á esto aludio Demodico [2] Lerio quando dixo, que el Orador de Causas debia imitar la Prienés. Y Hiponacte solia decir en proverbio: Mejor se ha portado que Biante Prienés.

4 Su muerte fue de esta manera: habiendo orado en defensa de un pleito de un amigo suyo (siendo ya anciano) y descansando un poco de esta fatiga, reclinó la cabeza en el seno de un nieto suyo, hijo de su hija. Habia tambien orado el contrario en la Causa; y como los Jueces sentenciasen en favor del cliente de Biante, vencido el pleito, fue hallado muerto en el seno mismo del nieto. Enterrolo magnificamente la ciudad, y escribio en su sepulcro este epitafio:

Cubre esta hermosa piedra y pavimiento
Al Prienés Biante, honor de Jonia.

El mio dice asi:

Aqui yace Biante, á quien Mercurio
Llevó tranquilamente,
Blanco nevado viejo, al sitio obscuro.
Oró y vencio la causa de un amigo;
Y en el pecho de un joven reclinado,
Vino á extender su sueño largamente.

5 Escribio de la Jonia hasta dos mil versos, el modo en que principalmente podia ser feliz. De sus Adomenos estos fueron los mas aplaudidos:

Si vives en ciudad, placer procura
Á los conciudadanos;
Pues esto gusta á todos.
Pero, por el contrario, la arrogancia
Ha sido siempre á todos perniciosa.

Sus sentencias son estas: Ser fuerte en el cuerpo es obra de la naturaleza; mas decir lo util á la patria, es cosa del animo y de la prudencia. Las riquezas vinieron á muchos aun casualmente. Llamaba infelíz á quien no podia sufrir la infelicidad: y enfermedad del animo apetecer imposibles, y olvidarse del mal ageno. Preguntado, qué cosa es dificil, respondio: Sufrir constantemente la decadencia del propio estado. Navegando una vez con unos impíos, como la nave fuese combatida de una tormenta, y ellos invocasen los Dioses, les dixo: Callad, no sea que los Dioses os vean navegar aqui. Á un hombre impío que le preguntó, qué cosa es piedad, no le respondio palabra: y como este le dixese quál era la causa de no responderle, dixo: Callo porque preguntas cosas que no te pertenecen. Preguntado, qué cosa es dulce á los hombres, respondio: La esperanza. Decia que antes queria juzgar entre enemigos, que entre amigos; porque uno de los amigos habia de quedar enemigo del todo; pero de los enemigos debia uno hacersele amigo. Preguntado otra vez, qué cosa deleita mas al hombre, respondio: La ganancia. Decia, que conviene midamos nuestra vida tanto como si hubiesemos de vivir mucho, quanto habiendo de vivir poco [3]. Que amemos como que habemos de aborrecer; pues son muchos los malos. Daba los consejos siguientes: Emprende con lentitud lo que pienses executar; pero una vez emprendido, sé constante en ello. No hables atropelladamente; pues indica falta de juicio. Ama la prudencia. Habla de los Dioses segun son. No alabes por causa de sus riquezas al hombre indigno. Si pretendes alcanzar alguna cosa, sea persuadiendo, nó coartando. Atribuye á los Dioses lo bien que obrares. Toma la sabiduria por compañera desde la juventud hasta la vejez; pues ella es la mas estable de todas las posesiones.

6 Hiponacte hace tambien memoria de Biante, como ya diximos. Y el desapacible Heráclito lo recomienda mucho, especialmente quando dice: En Priena nacio Biante hijo de Teutámo, cuyo nombre es mas respetable que el de los otros. Y los Prieneses le dedicaron una capilla que llaman Teutamio. Tambien es sentencia suya: Los malos son muchos.


  1. Diodoro Siculo cuenta este caso.
  2. Samuel Rochart lee Demodoco, como nombre mas conocido. El texto tiene Alerio: sigo la correccion de Menagio que es Lerio, haciendolo natural de Leros, isla del mar Jonio, patria de Ferecides.
  3. Siendo incierta la vida del hombre, me parece esta una sentencia de dificil inteligencia. ¿Querria Biante decir, que debemos medir nuestras operaciones, como que podemos morir presto, por mas que nuestra juventud, sanidad, robustez nos prometan una vida larga? Pero he aqui las palabras griegas: ΄Έλεγε τόν βίον οϋτω δεϊν μετρεϊν, ώς χαί πολύν χαί όλίγον χρόνον βιωσομένους. Y las latinas de Fr. Ambrosio Camadulense (primer traductor de Laercio) que todos adoptaron: Dicebat vitæ tempus ita metiendum, quasi et diu, et parum victuri simus.