Las tres musas últimas castellanas 009
Pues ya tiene la encina en los tizones
más séquito que tuvo en hoja y fruto,
y el nubloso Orïón manchó con luto
las (otro tiempo) cárdenas regiones;
pues perezoso Arturo, y los Trïones
dispensan breve el sol, y poco enjuto,
y con imperio cano y absoluto
labra el yelo las aguas en prisiones;
hoy que se busca en el calor la vida,
gracias al dueño invierno, amante ciego,
a quien desprecia Amor y Lisi olvida,
al yelo hermoso de su pecho llego
mi corazón, por ver si, agradecida,
se regala su nieve con mi fuego.