La tradición
LA TRADICION
Á Don Ricardo Palma
Ella no invoca á la severa Clio,
ni requiere de Tácito la pluma:
lleva un tinte de historia que se esfuma
como arrebol nocturno en el vacío.
Mas reclama del arte el señorío
para dar á la forma gracia suma,
y que el conjunto original resuma
interés, concisión, pureza y brío.
Tú las descubierto los secrelos de ella
y, del polvo de archivos seculares,
surgir la ordenas vivaracha y bella,
al golpe de tu mágica varilla,
con honra de tu nombre y de tus lares
y de la hermosa lengua de Castilla.
Manuel Nicolás Arízaga.
Guayaquil—1893.