La música en el entierro

Nota: En esta transcripción se ha respetado la ortografía original.


La música en el entierro.

Estando un hombre gracioso en los últimos ins tantes de su vida, el escribano que estendia su testamento le dijo:

— Fuerza será que consigne V. alguna cantidad para los músicos que hayan de asistir á su entierro.

Aquel hombre, conservando su humor festivo hasta las puertas de la eternidad, le replicó:

— La música que la pague el que la oiga.