La ausencia (Lista)
XXVI.
LA AUSENCIA.
Nace la aurora, y el hermoso día
Brilla de rojas nubes coronado:
En mi pecho, de penas abrumado,
La sonrosada luz es noche umbría.
De las aves la plácida armonía
Es para mí graznido malhadado,
Y estruendo ronco y son desconcertado
El blando ruido de la fuente fria.
Brotan rosas el soto y la ribera:
Para mí solo, triste y dolorido
Espinas guarda el mayo floreciente:
Que esta es, ó niño dios, tu ley primera:
No hay mal para el amor correspondido,
No hay bien, que no sea mal para el ausente.