Huyo la blanda voz y el tierno canto

Huyo la blanda voz y el tierno canto
de Fernando de Herrera


 Huyo la blanda voz y el tierno canto,   
 que celeste armonía espira y suena,   
 desta, de España luz, gentil sirena;   
 mas vuelvo al fin sujeto al dulce encanto.   
 

 Bien sé que este placer acaba en llanto;  
 que esto es imagen cierta de mi pena,   
 y amor injusto siempre me condena,   
 porque sirvo y padezco y sufro tanto.   
 

 Ulises, que pudiste venturoso   
 surcar seguro y sin temor del daño  
 el golfo de la bella Leucosía,   
 

 ¿Cuánto fueras más grande y valeroso   
 si tentaras perderte en este engaño   
 oyendo a la inmortal sirena mía?