Hame traido amor a tal partido
XXII.
Háme traido amor á tal partido,
Que ni puedo ni quiero conocerme;
Cuantas armas tenía le he rendido,
Pues le di la razon para vencerme.
Hombre nací y por hombre era tenido;
Pudieran seso y arte socorrerme,
El tiempo, la experiencia y el sentido;
Mas todo lo dejé, y quise perderme.
Señora, gran mal es quel hombre entiende
Cuanto aparta de sí, y no se arrepiente,
Y que sabe cuán poco bien se espera;
Que vive y morirá desta manera,
Fuera de humana forma ó acidente,
Sino de querer bien, que no se aprende.