Galatea cruel, ¡qué pago has dado
Galatea cruel, ¡qué pago has dado, qué amargo fin a cuanto te he querido, que hubiera ya de lástima movido un tigre, y a mí un mármol ablandado! ¡Oh duro golpe en pecho desarmado y en sangre de quien nunca te ha ofendido, si o es culpa ponerse así en olvido y en ti poner la vida y el cuidado! ¡Oh ingratos ojos a los ojos míos! ¡Oh frente para mí nunca serena, corazón sin amor, duro, inhumano! ¿Cuándo os acabaréis, de llanto ríos? ¿Cuándo no ha de acabar la mortal pena, que no la sufre ya el sufrir humano?