Diferencia entre revisiones de «Las mil y una noches:0926»

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m despiezator(Ed.Ex.Lady):generando el capítulo
 
Línea 18:
Pero el visir contestó: "Es inútil que argumentes con palabras ociosas. Lo ha ordenado el rey". Y dijo el pescador: "Así, ¡por Alah! puedes exigirme cien sellos, y no un sello, desde el momento en que se me toma por proveedor de alfombras". Y golpeó sus manos una contra otra, y salió del palacio, y se marchó en pos de su mujer, muy enfadado.
 
Y al verle de aquel modo, su mujer se preguntó: "Por qué estás enfadado". El contestó: "Calla. Y sin hablar más, levántate y recoge la poca ropa que poseemos, y huyamos de este país". Ella preguntó: "¿Por qué?" El contestó: "Porque el rey quiere matarme dentro de tres días". Ella dijo: "Pero ¿por qué?" El contestó: "¡Quiere de mí una alfombra de una fanega de larga y de una fanega de ancha para la sala de su palacio!" Ella preguntó: "¿No es nada más que eso?" El contestó: "Nada más". Ella dijo: "Está bien. Duerme tranquilo, que mañana yo te traeré la alfombra consabida, y la extenderás en la sala del rey". Entonces dijo él: "¡No me faltaba más que eso! Buenos estamos ahora. ¿Te has vuelto tan loca como el visir, ¡oh mujer! o acaso somos mercaderes de alfombras?" Pero ella contestó: "¿Quieres ahora mismamismo la alfombra? Porque te indicaré el sitio donde puedes encontrarla y traerla aquí". El dijo: "Sí, prefiero que lo hagas en seguida para estar seguro. De ese modo podré dormir tranquilo". Ella dijo: "Siendo así, ¡oh hombre! yalah, levántate y ve a tal paraje, cercano a los jardines. Allí encontrarás un árbol torcido, debajo del cual hay un pozo. Y te inclinarás sobre ese pozo y mirarás adentro, y gritarás: "Tu querida amiga te envía la zalema por mediación mía, Yy te encarga que me entregues para que yo se lo dé, el huso que ayer dejó olvidado en tu casa con las prisas por volver a la suya antes de que se hiciese de noche, porque queremos amueblar y alfombrar una habitación por medio de ese huso". Y el pescador dijo a su mujer: "Está bien".
 
Sin tardanza fué Pues al pozo consabido que estaba debajo del árbol torcido, miró al fondo, y gritó: "Tu querida amiga te envía la zalema por mediación mía, te encarga que me entregues el huso que dejó olvidado en tu casa, porque queremos amueblar una habitación por medio de ese huso".