Diferencia entre revisiones de «Crimen y castigo (tr. anónima)/Cuarta Parte/Capítulo I»

Contenido eliminado Contenido añadido
mSin resumen de edición
Sin resumen de edición
Línea 82:
«¿Será sincero?, pensó Raskolnikof.
 
‑No, el pagaré no me preocupó en ningún momento ‑‑dijo‑dijo Svidrigailof, volviendo al tema interrumpido‑. Permanecía en el campo muy a gusto. Por otra parte, pronto hará un año que Marfa Petrovna, con motivo de mi cumpleaños, me entregó el documento, como regalo, añadiendo a él una importante cantidad... Pues era rica. «Ya ves cuánta es mi confianza en ti, Arcadio Ivanovitch», me dijo. Sí, le aseguro que me lo dijo así. ¿No lo cree? Yo cumplía a la perfección mis deberes de propietario rural. Se me conocía en toda la comarca. Hacía que me enviaran libros. Esto al principio mereció la aprobación de Marfa Petrovna. Después temió que tanta lectura me fatigara.
 
‑Me parece que echa mucho de menos a Marfa Petrovna.
Línea 108:
‑¿Despierto?
 
‑‑Completamente‑Completamente despierto las tres veces. Aparece, me habla unos momentos y se va por la puerta, siempre por la puerta. Incluso me parece oírla marcharse.
 
‑¿Por qué tendría yo la sensación de que habían de ocurrirle estas cosas? ‑dijo de súbito Raskolnikof, asombrándose de sus palabras apenas las habia pronunciado. Estaba extraordinariamente emocionado.