Diferencia entre revisiones de «Gramática de la Lengua Castellana: 2.2»

''La lista va ordenada en tres columnas: I.ª de las palabras que rigen preposicion: la II.ª de las preposiciones regidas; y la III.ª (por via de exemplo) de las palabras regidas de las preposiciones.''

 

:abalanzarse á los peligros.

:abandonarse á la suerte.

:avocar (algo) á sí.

 

:balancear á tal parte.

:balancear en la duda.

:burlarse de algo.

 

:caber en la mano.

:caer en tierra, en error, en lo que se dice, en cuenta, en tal tiempo &c.

:curtido en trabajos.

 

:dar (algo) á alguno.

:dar por visto.

:duro de corteza.

 

:echar (algo) á, en, por tierra.

:echar (olor) de sí.

:extraviarse de la carrera.

 

:fácil de digerir.

:faltar á la palabra.

:fundarse en razon.

 

:girar (de una parte) á otra.

:girar por tal parte.

:gustar de alguna cosa.

 

:hábil en papeles.

:hábil para el empleo.

:hundir (alguna cosa) en el agua.

 

:idóneo para alguna cosa.

:igual á, con otro.

:ir tras alguno.

 

:jactarse de alguna cosa.

:jugar (alguna cosa) á tal juego.

:juzgar de alguna cosa.

 

:ladear (alguna cosa) á tal parte.

:ladearse (alguno) á otro partido.

:ludir ( una cosa) con otra.

 

:malquistarse con alguno.

:manar (agua) de la fuente.

:murmurar de alguno.

 

:nacer con fortuna.

:nacer (alguna cosa) de alguna parte.

:notificar (alguna cosa) á alguno.

 

:obligar (á alguno) á alguna cosa.

:obstar (una cosa) á otra.

:orillar á alguna parte.

 

:pactar (alguna cosa) con otro.

:pagar con palabras.

:purgar de sospecha.

 

:quadrar (alguna cosa) á alguno.

:qual de los dos.

:quitarse de quimeras.

 

:rabiar de hambre.

:rabiar por alguna cosa.

:rozarse en la conversacion.

 

:saber á pan.

:sacar (alguna cosa) de alguna parte.

:sustentarse de esperanzas.

 

:tachar (á alguno) de ligero.

:temblar de frio.

:tropezar en alguna cosa.

 

:último de, entre todos.

:uncir (los bueyes) á el carro.

:utilizarse en, con alguna cosa.

 

:vacar á los trabajos.

:vaciarse de alguna cosa.

:votar por alguno.

 

:zabullirse, ó zambullirse en el agua.

:zafarse de alguno, ó alguna cosa.

Este ajuste ó concierto de palabras se llama ''concordancia''. Sus reglas en la construccion natural son fáciles, pues las dicta la misma naturaleza, y se reducen á las siguientes.

 

 

El artículo ha de concertar en género y número con el nombre comun ó apelativo, como: el hombre: la muger: los hombres: las mugeres. Erraríase en la concordancia, si á hombre, que es masculino, se le diese artículo femenino, diciendo la hombre; y en la del número, si estando en singular, se le aplicase artículo plural, diciendo los hombre.

El artículo neutro lo no tiene plural, y concierta siempre en singular con algun adjetivo de una sola terminacion, como: lo fácil: lo grande: lo sublime: ó con la terminacion masculina de los adjetivos de dos terminaciones, como: lo bueno: lo malo.

 

 

El adjetivo ha de concertar en género y número con el nombre sustantivo, como: ministro sabio: ley justa: soldados valerosos: mugeres retiradas.

Debe evitarse siempre que se pueda, poner dos sustantivos masculino y femenino, uno en plural y otra en singular, para concertarlos con adjetivo de dos terminaciones; porque aunque en tal caso es mas tolerable concertarle con el plural, siempre causa disonancia. No faltarán exemplos para decir: los caudales y hacienda eran quantiosos: ó las haciendas y caudal eran quantiosas, pero mejor será elegir adjetivo plural de una sola terminacion, diciendo: los caudales y hacienda eran grandes: ó variar la frase, dando el adjetivo que corresponde á cada sustantivo: v. g. los caudales eran quantiosos: la hacienda mucha.

 

 

Los verbos han de concertar con los nombres sustantivos, y con los pronombres en número y persona, como: los hombres andan: las aves vuelan: yo aguardo: tú esperas: ellos caminan: este viene: ese vá: aquel vuelve.

 

 

El relativo ha de concertar con el antecedente en género y número, como: llamaron al reo, el qual se presentó: leyéronle la sentencia, la qual consintió: salieron al camino unos hombres, los quales eran salteadores: habia unas matas, las quales sirvieron para ocultarse. Aquí se ha caido dinero, aquel cuyo sea le tóme. Una capa se queda allí, sépase cuya es, y dénsela.