Diferencia entre revisiones de «Página:13 Cartas del Famoso Conquistador Hernán Cortés.pdf/195»
m →No corregido: Número de página a la cabecera - Faltan otras correcciones |
|||
Estado de la página | Estado de la página | ||
- | + | Corregido | |
Cuerpo de la página (para ser transcluido): | Cuerpo de la página (para ser transcluido): | ||
Línea 1: | Línea 1: | ||
todo el oro <ref>Casi todo el oro y joyas que tenia Cortés y los españoles se perdieron, y cuando se paró á México por fuerza, los Indios todo le arrojaron al agua, porque casi nada pareció; porque Dios mostró en esto que la conquista más habia sido por grapar las almas que los metales.</ref> y plata y joyas que en la tierra se habian habido, así de vuestra alteza como de españoles y mios, se perdia la mejor y más noble ciudad de todo lo nuevamente descubierto del mundo; y ella perdida, se perdia todo lo que estaba ganado, por ser la cabeza de todo y á quien todos obedecian. Y luego despaché mensajeros á los capitanes que habia enviado con la gente, haciéndoles saber de que me habian escrito de la gran ciudad, para que luego, donde quiera que los alcanzasen, volviesen, y |
|||
184 |
|||
por el camino más cercano se fuesen á la provincia de Tlascaltecal, donde yo con la gente ostaba en compañía, y con toda la artillería que pude y con setenta de caballo me fuí á juntar con ellos, y allí juntos y hecho alarde, se hallaron los dichos setenta de caballo y quinientos peones. E con ellos á la mayor priesa que pude me partí para la dicha ciudad, y en todo el camino nunca me salió á recibir ninguna persona del dicho Muteczama, como antes o solian facer, y toda la tierra estaba alborotada y casi despoblada; de que concebí mala sospecha, creyendo que los españoles que en la dicha ciudad habian quedado, eran muertos, y que toda la gente de la tierra estaba junta esperándome en algun |
|||
todo el oro (1) y plata y joyas que en la tierra se |
|||
habian habido, así de vuestra alteza como de espa- |
|||
ñoles y mios, se perdia la mejor y más noble ciu- |
|||
dad de todo lo nuevamente descubierto del mundo; |
|||
y ella perdida, se perdia todo lo que estaba ganado, |
|||
por ser la cabeza de todo y á quien todos obede- |
|||
cian. Y luego despaché mensajeros á los capitanes |
|||
que habia enviado con la gente, haciéndoles saber |
|||
de que me habian escrito de la gran ciudad, para que |
|||
luego, donde quiera que los alcanzasen, volviesen, y |
|||
por el camino más cercano se fuesen á la provincia |
|||
de Tlascaltecal, donde yo con la gente ostaba en |
|||
compañía, y con toda la artillería que pude y con |
|||
setenta de caballo me fuí á juntar con ellos, y allí |
|||
juntos y hecho alarde, se hallaron los dichos seten- |
|||
ta de caballo y quinientos peones. E con ellos á la |
|||
mayor priesa que pude me partí para la dicha ciu- |
|||
dad, y en todo el camino nunca me salió á recibir |
|||
ninguna persona del dicho Muteczama, como antes |
|||
o solian facer, y toda la tierra estaba alborotada |
|||
y casi despoblada; de que concebí mala sospecha, |
|||
creyendo que los españoles que en la dicha ciudad |
|||
habian quedado, eran muertos, y que toda la gen- |
|||
te de la tierra estaba junta esperándome en algun |
|||
(1) Casi todo el oro y joyas que tenia Cortés y los españo- |
|||
les se perdieron, y cuando se paró á México por fuerza, los |
|||
Indios todo le arrojaron al agua, porque casi nada pareció; |
|||
porque Dios mostró en esto que la conquista más habia sido |
|||
por grapar las almas que los metales. |