Diferencia entre revisiones de «Página:13 Cartas del Famoso Conquistador Hernán Cortés.pdf/679»

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estaba cerca y que podian venir sin temor, porque toda la tierra estaba de paz, y destos supe que aquella gente era de la del dicho Francisco Hernandez y que venian en busca de aquel puerto, y que venia por su capitan un Grabiel de Rojas. Luego despaché con estos dos hombres y con los indios que se habian venido á quejar, un alguacil con un mandamiento mio para el dicho Grabiel de Rojas, para que luego saliese de la dicha provincia é volviese á los naturales todos los indios é indias é otras cosas que les hobiese tomado, y demas desto le escrebí una carta para que si alguna cosa hobiese menester, me lo hiciese saber, porque se le proveeria de muy buena voluntad si yo la tuviese; el cual, visto mi mandamiento y carta, lo hizo luego, y los naturales de la dicha provincia quedaron muy contentos, aunque despues me tornaron á decir los dichos indios, que venido el alguacil que yo envié les habian llevado algunos. Con este capitan torné otra vez á escrebir al dicho Francisco Hernandez, ofresciéndole todo lo que yo allí tuviese, de que él y su gente tuviesen necesidad, porque dello crei vuestra majestad era muy servido, y encargándole todavía la obediencia de su gobernador. No sé lo que despues acá ha subcedido, aunque supe del alguacil que yo envié y de los que con él fueron, que estando todos juntos le habia llegado una carta al dicho Grabiel de Rojas de Francisco Hernandez, su capitan, en que le rogaba que á mucha priesa se
estaba cerca y que podian venir sin temor, porque
toda la tierra estaba de paz, y destos supe que
aquella gente era de la del dicho Francisco Her-
nandez y que venian en busca de aquel puerto, y
que venia por su capitan un Grabiel de Rojas. Lue-
go despaché con estos dos hombres y con los indios
que se habian venido á quejar, un alguacil con un
mandamiento mio para el dicho Grabiel de Rojas,
para que luego saliese de la dicha provincia é vol-
viese á los naturales todos los indios é indias é otras
cosas que les hobiese tomado, y demas desto le es-
crebí una carta para que si alguna cosa hobiese me-
nester, me lo hiciese saber, porque se le proveeria de
muy buena voluntad si yo la tuviese; el cual, visto mi
mandamiento y carta, lo hizo luego, y los naturales
de la dicha provincia quedaron muy contentos, aun-
que despues me tornaron á decir los dichos indios,
que venido el alguacil que yo envié les habian lle-
vado algunos. Con este capitan torné otra vez á es-
crebir al dicho Francisco Hernandez, ofresciéndole
todo lo que yo allí tuviese, de que él y su gente
tuviesen necesidad, porque dello crei vuestra ma-
jestad era muy servido, y encargácdole todavía
la obediencia de su gobernador. No sé lo que des-
pues acá ha subcedido, aunque supe del alguacil
que yo envié y de los que con él fueron, que es-
tando todos juntos le habia llegado una carta al
dicho Grabiel de Rojas de Francisco Hernandez, su
capitan, en que le rogaba que á mucha priesa se