Diferencia entre revisiones de «Página:13 Cartas del Famoso Conquistador Hernán Cortés.pdf/531»

 
Estado de la páginaEstado de la página
-
No corregido
+
Corregido
Cuerpo de la página (para ser transcluido):Cuerpo de la página (para ser transcluido):
Línea 1: Línea 1:
521
521


ra principio de mi ofrecimiento., envió ahora con Diego de Soto, criado mio, ciertas cosillas que entonces quedaron por desecho y por no dignas de acompañar á las otras, y algunas quo después acá yo he hecho, que, aunque como digo, quedaron por desechadas, tienen algún parecer con ellas; envió asimismo una culebrina de plata (1), que entró
ra principio de mi ofrecimiento., envió ahora con
en la fundicion della veinte y cuatro quintales y dos arrobas, aunque creo entró en la fundición algo, porque se hizo dos veces, y aunque me fué asaz costosa, porque, demás de lo qué me costó el metal, que fueron veinte y cuatro mil y quinientos pesos de oro, á razón de á cinco pesos de oro el marco, con las otras costas de fundidores y grabadores y de los llevar hasta el puerto, me costó más de otros tres mil pesos de oro; pero por ser tina cosa tan rica y tan de ver, y digna de ir ante tan alto y excelentísimo príncipe, me puse á lo trabajar y gastar: suplico á vuestra cesárea majestad reciba mi pequeño servicio, teniéndole en tanto cuanto la grandeza de mi voluntad para le hacer mayor, si
Diego de Soto, criado mio, ciertas casillas que entonces quedaron por desecho y por no dignas de
pudiera merecer; porque, aunque estaba adeudado, como á vuestra alteza arriba digo, me quise adeudar en más, deseando que vuestra majestad conozca el deseo que de servir tengo; porque he sido tan mal dichoso, que hasta ahora he tenido tantas
acompañar á las otras, y algunas quo después acá

yo he hecho, que, aunque como digo, quedaron
(1) Mejor diria una culebrina de oro, por lo mucho que tenia, y deseara yo saber un ejemplar de otro conquistador que tan al principio de la conquista hubiese enviado á su soberano una pieza tan primorosa, de tanto peso y valor.
por desechadas, tienen algún parecer coa ellas; envió asimismo una culebrina de plata (1), que entró
en de fundicion della veinte y cuatro quintales y
dos arrobas, aunque, creo entró en la fundición algo,
porque se hizo dos veces, y aunque me fué asaz
costosa, porque, demás de lo qué me costó el metal,
que fueron veinte y cuatro mil y quinientos pesos de
oro, á razón de á cinco pesos de oro el marco, con
las otras costas de fundidores y grabadores y de
los llevar hasta el puerto, me costó más de otros
tres mil pesos de oro; pero por ser tina cosa tan rica y tan de ver, y digna de ir ante tan alto y excelentísimo príncipe, me puse á lo trabajar y gastar: suplico á vuestra cesárea majestad reciba mi
pequeño servicio, teniéndole en tanto cuanto la
grandeza de mi voluntad para le hacer mayor, si
pudiera merecer; porque, aunque estaba adeudado,
como á vuestra alteza arriba digo, me quise adeudar en más, deseando que vuestra majestad conozca «1 deseo que de servir tengo; porque .he sido
tau mal dichoso, que hasta ahora he tenido tantas
(1) Mejor diria una culebrina de oro, por lo mucho que
tenia, y deseara yo saber un ejemplar de otro conquistador
que tan al principio de a conquista hubiese enviado á soberano una pieza tan primorosa, de tanto peso y valor.