Diferencia entre revisiones de «Página:Pío XI - Nos es muy conocida (28.03.1937).pdf/11»
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Esto tiene una aplicación especial en el extenso territorio de Vuestra Nación, donde la variedad de necesidades y condiciones locales puede exigir que, conservando una base de principios comunes, se empleen métodos diferentes de organización y se den también soluciones prácticas diversas entre sí, pero igualmente rectas para resolver un mismo problema. |
Esto tiene una aplicación especial en el extenso territorio de Vuestra Nación, donde la variedad de necesidades y condiciones locales puede exigir que, conservando una base de principios comunes, se empleen métodos diferentes de organización y se den también soluciones prácticas diversas entre sí, pero igualmente rectas para resolver un mismo problema. |
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A Vosotros os tocará, Venerables Hermanos, puestos por el Espíritu Santo para gobernar la Igíesia de Dios, dar la última decisión práctica en estos casos, a la cual obedecerán los fieles con docilidad y exactitud. Cosa que deseamos con todo nuestro corazón, porque la recta intención y la obediencia siempre y en todas partes son condiciones indispensables para atraer las bendiciones divinas sobre el ministerio pastoral y sobre la Acció n Católica y para fijar aquella unidad de dirección y aquella fusión de energías que son requisito indispensable para la fecundidad del apostolado. Conjuramos por tanto con toda Nuestra alma a los buenos católicos mejicanos a que tengan en grande estima y amen la obediencia y la disciplina. «Oboedite Praepositis vestris et subiacete eis. Ipsi enim pervigilant, quasi rationem pro animabus vestris reddituri». Y que sea obediencia llena de gozo y estimuladora de las mejores energías, «ut cum gaudio hoc faciant et non gementes» (Hebr. |
A Vosotros os tocará, Venerables Hermanos, puestos por el Espíritu Santo para gobernar la Igíesia de Dios, dar la última decisión práctica en estos casos, a la cual obedecerán los fieles con docilidad y exactitud. Cosa que deseamos con todo nuestro corazón, porque la recta intención y la obediencia siempre y en todas partes son condiciones indispensables para atraer las bendiciones divinas sobre el ministerio pastoral y sobre la Acció n Católica y para fijar aquella unidad de dirección y aquella fusión de energías que son requisito indispensable para la fecundidad del apostolado. Conjuramos por tanto con toda Nuestra alma a los buenos católicos mejicanos a que tengan en grande estima y amen la obediencia y la disciplina. «Oboedite Praepositis vestris et subiacete eis. Ipsi enim pervigilant, quasi rationem pro animabus vestris reddituri». Y que sea obediencia llena de gozo y estimuladora de las mejores energías, «ut cum gaudio hoc faciant et non gementes» (Hebr. 13, 17)<ref>"Obedeced a vuestros pastores y someteos a ellos, porque velán por vuestras almas como quienes han de rendir cuentas"</ref>. El que no obedece sino con desgana y como a la fuerza, desfogando su resentimiento interno en críticas amargas contra sus Superiores y compañeros de trabajo, contra todo lo que no es según el proprio parecer y juicio, aleja las bendiciones divinas, debilita el nervio de la disciplina y destruye donde se debiera edificar. |
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Junto con la obediencia y la disciplina Nos place traer a la memoria |
Junto con la obediencia y la disciplina Nos place traer a la memoria |