Esparza: Qué amador tan desdichado
¡Qué amador tan desdichado,
que gané
-en la gloria de amadores-
el más alto y mejor grado,
por la fe
que tuve con mis amores!
Y así como Lucifer
se perdió por se pensar
igualar con su Señor,
así me vine a perder
por me querer igualar
en amor con el Amor.