En los campos de Vergara

En los campos de Vergara
de Juan Nicasio Gallego


 ¿Qué inusitada aclamación festiva   
 convierte el gozo de mi patria en duelo?   
 ¿Por qué de mar a mar con raudo vuelo   
 suena sin fin centuplicado el viva?   
 

 La Paz, sí: ¿no la veis, de fresca oliva  
 la sien ordena, descender del cielo,   
 en su diestra agitar cándido velo,    
 y ahuyentar la Discordia vengativa?   
 

 ¡Oh momento feliz! Su horrible tea   
 de la nación magnánima española 
 maldita siempre y execrada sea;   
 

 y anuncie el blanco lino que hoy tremola   
 y en que la cifra de Isabel campea,   
 un grito, un pensamiento, un alma sola.