El reparto del hambre

Nota: En esta transcripción se ha respetado la ortografía original.


El reparto del hambre.

Un marido, que no ganaba para mantener á su mujer y á sus hijos, tenia la manía de criar perros, hasta el estremo de que, teniendo ya seis en casa,

tomó todavía dos ó tres pequeños que le regaló un vecino.

— Pero hombre, le dijo su mujer, ¿por qué traes mas perros si no tienes para darles otra cosa que hambre?

— Pues por eso los traigo, dijo el marido; porque no habiendo que darles otra cosa que hambre, cuantos mas sean, á menos les tocará.