El poeta sobre creer, y no creer

Nota: Se respeta la ortografía original de la época
FÁBULA IX.
no creas de ligero, y menos del que murmura.
El poeta sobre creer y no creer.

El creerlo todo y no crer nada, es igualmente peligroso. De uno y otro apuntaré brevemente varios ejemplos. Hipólito murió, porque se dió crédito á su madrastra; Por no habérsele dado á Casandra, fue asolada Troya. Luego se debe examinar mucho la verdad, antes que una resolucion indiscreta juzgue con desacierto; mas para no desacreditar esta verdad con antiguallas fabulosas, te contaré lo que pasó en mi tiempo.

Como un marido amase mucho á su muger, y previniese ya la toga blanca para su hijo, fue llamado á parte por un liberto suyo, que esperaba ser su inmediato heredero, si el hijo faltase; el cual después de haberle contado muchos mas de los delitos de su buena muger, añadió lo que conocia, que habia de herir mas en lo vivo á quien le amaba; y fue, que á su casa venia frecuentemente á hurtadillas un hombre con quien ella perdia su fama, y desperdiciaba los bienes de la casa. Irritado él con este falso testimonio, fingió, que iba á la quinta, y quedóse, oculto en el lugar: luego á la noche entró de improviso en su casa, encaminándose en derechura al cuarto de su muger; en el cual ella habia mandado dormir á su hijo, por guardarle mejor, respecto de su edad adulta. Mientras buscan luz, y mientras se azora la familia, no pudiendo contener el ímpetu de su cólera enfurecida, se llega á la cama y á tientas toca una cabeza, Luego que sintió que tenia cortado el cabello, le atraviesa el corazon con la espada, no reparando en nada, á trueque de vengar su agravio. Traida la luz, así que vió á su hijo y á la inocente esposa, que dormia en su alcoba, y rendida al primer sueño, nada habia sentido, se anticipó á darse el castigo de su maldad, y se arrojó sobre la espada, que habia desembainado su credulidad. Los acusadores dieron querella contra la muger, y la obligaron á comparecer en Roma ante los centumviros. Tenia contra sí las sospechas de la malignidad, porque poseía los bienes del difunto. Salen á la defensa sus abogados, alegando fuertemente á favor de la muger inocente. Entonces los jueces pidieron al emperador Augusto, que les ayudase á hacer justicia, á la que estaban obligados por su juramento, porque se hallaban embarazados en una causa tan intrincada. El César, despues que disipó las tinieblas de la calumnia, y halló el orígen cierto de la verdad: Pague, dijo, la pena el liberto autor de esta tragedia; porque á la muger despojada del hijo, y juntamente delmarido, antes la juzgo digna de lástima, que de castigo. Que si el padre de familias hubiera examinado bien tan atroces delaciones, si hubiera desentrañado el falso testimano hasta dar en la raiz, no hubiera arruinado su asa con funesto arrojo.

Nada desprecie el oído, ni se crea de ligero, pues tal vez pecan aun los que no pensaras, y los que no pecan son infamados con mentiras. Esto pueda tambien servir de aviso a los sencillos, para que no juzguen de las cosas por la opinion agena. Porque la varia ambicion de los mortales ta se deja llevar de su aicion, ya de su desafecto. Aquel tendrás bien conocido, á quien hubieres tanteado por tí mismo.

Esto he contado mas á la larga, porque he disgustado á algunos con la demasiada brevedad.

notas.

Hipolytus, hijo de Theseo y de la Amazona Hipolita ó Antioga. Su madrastra Fedra acusó falsmente á Hipólito, á quien, creyéndole culpado su padre, le maldijo; y Neptuno con un monstruo marino espantó de tal manera los caballos del carro de Hipólito, que este cayó del carro y murió de la caida.

Casandræ, hija de Priamo rey de Troya, que predijo, que Troya se perderia con la entrada del famoso caballo. Æneid. 10, v. 246.

Ilium. Troya se llamó así de Ilus uno de sus reyes. La ruina de Troya se refiere Æneid. 2, á v.3.

Fabulosa. Da á entender, que las historias de Hipólito y Casandra pueden ser tenidas por fabulosas.

Togamque puram. La pretexta era una Toga entretejida de púrpura, que los niños especialmente de distincion, lleveban hasta los diez y siete años, los cuales cumplidos,se vestian la Toga pura, llamada así, porque no tenia mezcla alguna de púrpura. Cic. l. 9. ad Attic. Ep. 6. hablando de su hijo dice: Ciceroni meo togam puram cùm dare Aprini vellem.

Torisum. Andaban en Roma los jóvenes con el pelo atado hasta la edad de quince ó diez y seis años, en que tomaban la Toga pura, de que se habló arriba. A este tiempo les solian cortar el pelo á la usanza de los que ya eran varones. La toga pura, se llamaba tambien viril: Sumsisti virilem Togam, quam statim muliebrem stolam reddidisti. Cic. Philip. 2. c. 18. Sobre el modo de cubrirse y descubrirse las cabezas de los romanos, y sobre el uso de atarse y cortarse el pelo, véase á Plutar. in Tiber. Grac.

Proximum. Horat. Satyr. 2, 5, dijo, secundus hœres.

Representavit in se pœnam. Significa elegantemente este verbo la anticipacion de hacer algo; v. gr..pagar antes que caiga el plazo: Si qua etiam factura facienda est in representando. Cic. ad Att. 12 Ep. 29. anticipar el logro de la libertad á costa de la vida: Corpus libenter obtulerint, si representari morte mea libertas civitatis potest. Philip. 2. in fine.

Ad Centum viros. Tribunal compuesto de cien Jueces, aunque en realidad eran 105, es á saber, tres de cada una de las 35 Tribus de Roma.

Divo. Cuando morían los emperadores, empezaban á ser tenidos por dioses. Vespasiano, cuando se le agravaba: la enfermedad, decia burlándose: Ut puto, Deus fio. Suet. en su Vida, c .23.

Augusto. Nombre comun á todos los emperadores, que se tomó, de Augur.