EL PALCO ESTRECHO

Mas acá, mas acá.   Yo estoy muy bien.
Llueve; y hace una cruel limitación.
Avanza, avanza el pie.

Hasta qué hora no suben las cortinas
esas manos que fingen un zarzal?
Ves? Los otros, qué cámodos, qué efigies.
Mas acá, mas acá!


Llueve.   Y hoy tarde pasará otra nave
cargada de crespón;
será como un pezón negro y deforme
arrancado a la esfíngica Ilusión.

Mas acá, mas acá.  Tú estás al borde,
y la nave arrastrarte puede al mar.
Ah, cortinas inmóviles, simbólicas....
Mi aplauso es un festín de rosas negras:
cederte mi lugar!
Y en el fragor de mi renuncia triste,
un hilo de infinito sangrará.

Yo no debo estar tan bien;
avanza, avanza el pié!