Nuevas fábulasNuevas fábulasFelipe Jacinto Sala
Ese monte, que se atreve
a ocultar su condición,
disimulando con nieve
el volcán del corazón,
¿no os parece que es aleve?
La lisonja aduladora,
que en frases de leche y miel
se está haciendo encubridora
de un corazón todo hiel,
¿no es verdad que es muy traidora?