Nuevas fábulasNuevas fábulasFelipe Jacinto Sala
Pide el azogue candado;
quien lo quisiere guardar
téngalo muy encerrado;
pues, si se llega a soltar,
no puede estar sosegado.
Azogue y secreto son
de la misma condición;
quien blasone de discreto,
cuide no rompa el secreto
las puertas del corazón.