El Gíbaro/Escena IV
antando estaba
ey pitirre
En la copa de una
seyba,
Cuando salen de
una casa,
O mejoy, de ebajo
de eya,
Jasta unas treinta presonas
A cuay mas toas compuestas.
(Ey que menos diba en yegua).
Los nombres ensapataos
Y casi toos con chaqueta,
Yeban aygunos pañuelo
Amarrao en la cabesa,
Y sombrero e pelo negro,
Tejío entero, ó de empleyta,
Camisas aymionáas,
Y carsones e tapeta.
Las mujeres yeban gorras
De pelo con plumas negras,
Guantes de algoón tejíos.
Y argunas, sayas e séa;
Sapatos e marroquin
Y tumbagas muy sobelbias,
De aqueyas de pocos riales
Que briyan como las pieiras;
Pañuelos y pañuelones
De too grandol y manera,
Y argoyitas y sarsiyos,
Y junquiyos y caënas.
Toiticos á cuay mas
Muy bien ensiyáa su bestia;
Unos con bocao e plata,
Y e colores las riendas,
Otros con jáquimas, y otros
Con sus frenos e correa.
Las tajarrias, asericos,
Aparejos y aguaeras
Eran tóos nobesitos
Y jechos pa aqueya fiesta,
Que era la boa de Peiro
Hijo der Guajon Iglesias,
Con Gilia, la muy pulía,
Hija de Toño Ribera,
Y aquey dia se casaban
Con grandísima querensia.
La mosa e cuando en cuando
Bia ar nobio e manera,
Que bien clarito le isia:
Peiro, tuya es esta prenda.
Y er sortaba caa bufío
De gusto ar miral su jembra,
Que ni con er susuncoyda
Se cambiara aunque er quisiera.
Ey soy estaba una vara
Mas arriba de la tierra,
Cuando pol medio ey Barrero
Caminaban pa la Iglesia;
Habiéndose ya apeao
En caje de una parienta.
Yegan, y er cura, que estaba
Asperándose á la pueita,
Los espachó, y dijo misa
Toyto en un requimeternan;
Mas ar salil encontraron
Abieytas ya toas las tiendas
De pulpería y de ropa,
Bentorriyos y rancheras;
Y los mosos, jumaseros;
Ey pueblo entero asperando
A que los novios salieran.
¡Bárgame Dios que sanfransia,
Luego que estuvieron fuera,
De matracas y fotutos,
Y con palos y con pieyras
Pegando en los mostraores
Y gorpeando las pueytas!
Er uno gritaba: juse,
Carabuco bira y seja;
Er otro: mira; atarraya
Esa nobiyaberrenda.
Fueron á cojel las bestias,
Y salieron dey Barrero
Camino dey Aguabuena.
Ayí habia combiaos
Que pasaban e sesenta,
Y los músicos, que ay punto
Que yegó la gente nueba,
Sin aguayday que pasaran
Los cumplios y etiquetas;
Cojiendo los estrumentos
Tocaron unas caenas,
Y er baile jasta er comey
Duró en caliente y e veras.
Los suegros y los pairinos
Con los nobios á la mesa
Se asentaron; los emas
Caa uno e su manera,
Ñangotaos, en las jamacas,
Paraos y en la escalera.
No faytó er arros con carne,
Con coco y con leche buena,
Ni los biñuelos de ñame,
Ni la naranja en conseyba,
Ni ey romo, ni ey anisao,
Despues de yenal ey buche
Boybieron á andal las pieynas
Jasta la hora de senal;
Y así que pasó la sena
Con mas gana que ay prensipio
Too er mundo se menea.
Ey sor los jayó bailando
Sin que naydense rindiera:
Entonces se espidieron,
Y aquí se acabó la fiesta.
De lo que pasó espues
Los nobios darán la cuenta.