Don Manuel Ruiz Zorrilla

​El Museo Universal​ (1869)
Don Manuel Ruiz Zorrilla
DON MANUEL RUIZ ZORRILLA.


El ministro de Fomento del Gobierno provisional, cuyo retrato verán en este número nuestros lectores, es una de las personas, que, en sentir de la generalidad, se ha entregado con mas fé y mayor ahinco á la tarca de traducir en hechos el espíritu de la revolución que elevó al poder el ministerio actual. Desde los primeros actos del nuevo gobierno, comenzó á notar la prensa periódica, que la fragua de este departamento gubernamental era la mas candente y d fuego el mas activo para fundir decretos en consonancia con las aspiraciones liberales de la mayoría de la nación; y, en efecto , los que sean aficionados á leer periódicos, no habrán dejado de notar, que mientras la censura se cebaba con los colocados al frente de otros ministerios, ya por su lentitud y pereza en la obra de demolición y reconstrucción, ya por no acometer decididamente las reformas necesarias, el señor Ruiz Zorrilla recibía de continuo plácemes y enhorabuenas por sus resoluciones y decretos. Verdaderamente debemos reconocer en este ministro un hijo legítimo de la revolución, que toma á pecho la faena y considera como cuestión de honra el no parecer desnaturalizado; pero, si, por ejemplo, mucho ha hecho respecto á la enseñanza en general, y nosotros hemos sino de los que no le han escaseado elogios, hallamos todavía un gran vacío en todo lo referente á la organización universitaria y á la rehabilitación de la autonomía de estas corporaciones, destinadas á un influjo y papel importantísimo en épocas de libertad. Es preciso que las universidades dejen de ser por completo oficinas de gobierno como las hicieron los moderados en España; y que el cláustro, ó llámesele revolucionariamente, el jurado universitario, recobre la iniciativa, la independencia, la acción y autoridad, la respetabilidad é importancia que tenia en España aun en tiempos del absolutismo. En una palabra, y lo aconsejamos al señor Ruiz Zorrilla (en quien vemos deseos de acertar) , una cosa es ser ministro revolucionario y otra desorganizador: y la verdad es que la institución universitaria ha sentido hasta ahora, mas los efectos de lo segundo que de lo primero. Todavia puede consumarse y consolidarse esta reforma y el señor Ruiz Zorrilla, bien aconsejado, es ministro de talla capaz de acometerla para bien del país y gloria suya.