Discurso del Diputado Jesús Murillo Karam de la fracción parlamentaria del Partido Revolucionario Institucional PRI respecto al Informe del Sismo de 1985

El C. Jesús Murillo Karam: - Compañeros diputados, la tragedia, el drama no hizo diferencias. Lesionó, arrasó, mutiló al pueblo que vivía en la ciudad de México.

Hoy nosotros aquí estamos enfrentados a una seria responsabilidad, a una muy seria responsabilidad, como alguien decía en el uso de la palabra antes que yo, nuestra voz debe ser la de aquellos que en este momento no tienen voz.

Cuando hay un drama nacional, la lucha política partidista debe orientarse con limpieza haciendo a un lado intereses personales y minúsculos para enfrentar los verdaderos intereses nacionales.

Los diputados aquí reunidos, la representación nacional respondió pidiendo casi todos la palabra ante lo que pareció ser el arrebato, la pretendida capitalización de un drama en el beneficio de un interés particular y eso no puede ser, no debe ser, no permitirémos que sea la voz nacional. Necesitamos, es nuestra obligación encontrar soluciones idóneas y ante el incendio del bosque no buscar salvar un árbol; necesitamos usar de nuestra inteligencia y de nuestra madurez; necesitamos estar a la altura de las circunstancias, a la altura del problema. Por ello, por esa necesidad a que nos obliga el momento por el que vivimos, el que atravesamos, yo quiero invitarlos a todos, aunque estoy seguro que no es necesario, porque la gran mayoría de los diputados que están en este salón, de todos los partidos políticos, tienen en este momento en su conciencia, en su entender el saber lo que nos debe motivar en este momento.

Qué bueno que diputados de cualquier partido político vengan en este momento a señalar lo que la inminencia de lo inmediato nos reclama. Qué bueno que se señale la necesidad de la intervención de Fonhapo y qué bueno que lo haga un diputado de un partido y que lo ratifique el del otro, qué bueno que sean esos los señalamientos que tenemos que hacer aquí, que bueno que como diputados seamos capaces de ver los errores en los que estamos cayendo, seamos capaces de ver las soluciones que tenemos que plantear, seamos capaces de dirigir los planteamientos que la gran mayoría del pueblo nos hace y seamos capaces de señalar a la autoridad ejecutiva lo que en este momento hace falta. Qué bueno que eso hagamos, que bueno que en esto nos convirtamos, qué bueno que los partidos todos y los diputados todos en este momento nos convirtamos en voz de la conciencia nacional.

Qué bueno que aquí señalamos todo lo que haya que señalarse. Pero todo esto debe tener un denominador común, un denominador común que en este momento hace que la verdad, mi intervención en esta tribuna sea verdaderamente producto de cierto enojo que me provoca al encontrar actitudes que pretenden tomar cuestiones personales cuando están las nacionales por encima de ella.

Sigamos, señores diputados, haciendo uso de la inteligencia; pensemos con detenimiento porque esa es nuestra obligación y busquemos las soluciones que sean las que realmente convengan al interés nacional, las que realmente convengan al pueblo de México.

Vamos a olvidarnos en este momento de que en las próximas elecciones tenemos que conseguir electores, para que pensemos que allá afuera los mexicanos han borrado diferentes ideologías, religiosas y económicas para unirse en una tragedia nacional. Hagamos, por favor, lo mismo en esta tribuna.

El C. Presidente: - En uso de la palabra el C. diputado Pablo Pascual Moncayo.

El C. Pablo José Pascual Moncayo: - Señor presidente; compañeros diputados:

El día 19 se dió a la prensa un comunicado por parte de todos los grupos parlamentarios que actuamos en esta LIII Legislatura, donde establecíamos un compromiso que señalaba, entre otras cosas, el que íbamos a poner en un segundo plano o en un tercer plano nuestras diferencias políticas para enfrentar las tareas que reclaman al país, las tareas que está enfrentando el pueblo mexicano ante la tragedia.

Nosotros queremos refrendar este compromiso, pero refrendarlo significa que efectivamente pasemos a puntualizar las tareas. Y en esta tribuna pensamos que hay que ser muy responsables y que cada quien es responsable de lo que dice en la tribuna, y en esa medida tiene que enfrentarla.

Nosotros pensamos que si el país está en un estado de emergencia y la población mexicana, particularmente la citadina, está en estado de emergencia esta Cámara debe actuar en consecuencia y ponerse, por lo tanto, en ese estado. Es decir, las tareas que debe enfrentar la Cámara de Diputados tiene que ver con las tareas de emergencia.

Nosotros sabemos, creo que todos podríamos estar de acuerdo, en que la magnitud del desastre, las dimensiones de este desastre, rebasan por mucho la capacidad de cualquier Estado, de cualquier gobierno para dar respuesta; podemos estar de acuerdo en eso, pero debemos estar de acuerdo también, compañeros, en que dadas las tareas y las dimensiones del conflicto y los requerimientos que tiene la población, también no todo está bajo control; también no todo está funcionando de la mejor manera y se requiere de un sinnúmero de tareas y que hay aciertos y que también hay errores, tenemos que reconocerlo.

Nosotros, planteamos que lo que debemos plantear, lo que debemos discutir ahora, son las tareas de reconstrucción, las tareas de reconstrucción en una ciudad que tenemos que enfrentarla a los niveles, un primer nivel que son aquellas tareas inmediatas, aquellas tareas de salvamento, aquellas tareas de asistencia a los damnificados, aquellas tareas de reubicación de los damnificados; que debemos enfrentar la especulación que ya se está presentando, se está presentando especulación en los alimentos, se está vendiendo el agua; se está presentando ya especulación en la renta urbana; tenemos que enfrentar eso, pero debemos de plantear también un segundo nivel que tiene que ver con un proyecto real de reconstrucción que signifique qué es lo que estamos pensando y de qué manera traducimos nosotros lo que consideramos como reconstrucción; porque como se ha dicho aquí en la tribuna, todos hemos asistido por una parte, dada la magnitud, insistiría, a la falta de coordinación, o dada también la gran participación de la ciudadanía, a la falta de coordinación que se ha presentado de parte de las autoridades competentes; justificable dada la magnitud, pero por lo tanto, también puede ser corregible y que nosotros tenemos que ver en esta tarea.

Hemos enfrentado, hemos visto, más bien, y hemos asistido emocionados a la gran participación ciudadana, a la forma en la cual se ha desplegado la solidaridad, de la manera en la cual ha participado el grueso de la ciudadanía en las labores de rescate y asistencia a los damnificados. Pero esto así expresado también en el proyecto de tareas de reconstrucción, y que no han encontrado canales de participación democrática a través de los cuales puedan participar organizadamente, y efectivamente ha habido posibilidad de participar pero también ha habido freno para participar, dados los mecanismos burocráticos y falta de instrumental, de participación, falta de canales de participación democrática.

Nosotros debemos llegar a una primera conclusión, que esta Cámara debe abocarse a estar a la altura de las tareas, es decir, a estar a la altura de la reconstrucción y ponerse en estado de emergencia y ponerse en estado de emergencia significaría, primero, señores diputados, que efectivamente esta comisión especial que se nombró debe ampliarse, pero no debe ampliarse exclusivamente con los presidentes de las comisiones, sino que debe permitirse, debe ser obligatorio el que tenga una participación más amplia, no sólo porque estamos representadas las diferentes fracciones, sino por las tareas a las cuales debe abocarse esta comisión especial y en esta medida bienvenidos los presidentes de las comisiones, pero debe abrirse también para la participación de un mayor número de diputados, porque las tareas, según las concebimos nosotros, son numerosas, son muy amplias y debemos enfrentarlas.

Nosotros debemos ver la necesidad de que actúen las comisiones normales de la Cámara en ese proyecto de reconstrucción; compañeros, tenemos que ver cuál va a ser el financiamiento de la reconstrucción y aquí tienen que ver aquellas comisiones que están en el área de lo económico; tenemos que ver cuáles van a ser sus mecanismos de financiamiento de la reconstrucción; tenemos que ver cuáles son los planteamientos urbanos que se plantean para la reconstrucción de la ciudad; tenemos que ver también políticamente de qué manera se puede expresar la ciudadanía, no solamente en situaciones de emergencia, sino en una forma más cotidiana. Nosotros tenemos que ver, en fin, un sinnúmero de tareas que tienen que ser planteadas en este estado de emergencia y nosotros tenemos que combinar por lo tanto las actividades de las comisiones normales de esta Cámara junto con esta Comisión Especial; pero tenemos que idear mecanismos sin los cuales efectivamente confrontemos diferencias, confrontemos puntos de vista, pero trabajemos. No caigamos en este seudo debate que se dio hace unos momentos de qué manera íbamos a hablar, queremos hablar no simplemente para criticar, sino que existe un compromiso de base, existe un compromiso que todas las fracciones parlamentarias firmamos responsablemente de subordinar, de pasar a un tercer plano nuestras diferencias políticas, de no hacer propaganda en función de nada, sino meternos a las tareas nacionales que requiere la reconstrucción. (Aplausos.)

Nosotros pensamos, compañeros, que hay situaciones de emergencia que tenemos que abordar el día de hoy, y debemos abordarlos no si los propone una fracción u otra; si se está en este momento especulando, tenemos que enfrentar la especulación, si en este momento se está tratando de especular con las rentas, debemos de sacar una ley que enfrente la especulación, compañeros, no es un problema que lo proponga ninguna de las fracciones, no queremos llevarnos ninguna estrella; queremos simplemente que enfrentemos las tareas.

Pensamos nosotros que este sinnúmero de tareas debe ser efectivamente resultado de que sumemos las voluntades de todos los miembros de esta Cámara, de que efectivamente hagamos pormenorizadamente una distribución de las tareas a cada uno de los diputados para que coadyuvemos a las labores de rescate, a las labores de ayuda a los damnificados y que también ayudemos a las labores que reclama el momento de una reconstrucción democrática de la ciudad. Muchas gracias.[1]

Referencias editar

  1. Legislatura LIII - Año I - Período Ordinario - Fecha 19850924 - Número de Diario 23 (L53A1P1oN023F19850924.xml)Núm. Diario:23 ENCABEZADO DIARIO DE LOS DEBATES DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS DEL CONGRESO DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS "LIII" LEGISLATURA Registrado como artículo de 2a. clase en la Administración Local de Correos, el 21 de septiembre de 1921 AÑO I México, D. F., martes 24 de septiembre de 1985 TOMO I. NÚM.. 23 SUMARIO