Discurso: 6 de diciembre de 2003


<Discursos del Presidente George W. Bush


Buenos días.

Esta semana recibimos informes adicionales de que la economía de Estados Unidos está cobrando fuerza.

En Noviembre, nuestro país agregó 57,000 empleos, y la tasa de desempleo bajó a un 5.9%. En los últimos cuatro meses, 328,000 estadounidenses empezaron a trabajar en empleos nuevos.

En el tercer trimestre de 2003, la productividad de los trabajadores aumentó a una tasa anual del 9.4 por ciento - el ritmo más rápido desde 1983. La productividad creciente significa salarios crecientes. Y los logros en productividad ayudan a las compañías a mantener sus precios bajos, lo que permite a las familias estadounidenses hacer que sus cheques de pago vayan más lejos.

Otras señales económicas son positivas. Encuestas muestran que la actividad manufacturera está a su nivel más fuerte en 20 años. Las ventas de automóviles aumentaron en Noviembre, y la construcción de casas sigue creciendo.

Durante esta temporada, las familias estadounidenses están planeando para el año que viene, y tienen razón de ser optimistas. La economía estado-unidense continúa en el camino fuerte de la recuperación.

Con ventas sólidas y ganancias ascendientes, las compañías seguirán contratando a nuevos trabajadores en el año venidero. Y debido al alivio tributario, todos los trabajadores podrán guardar más de lo que ganan - y los pequeños negocios podrán crear más empleos.

Desde 2001, hemos rebajado los impuestos para todos los que pagan impuestos. Hemos reducido la pena por matrimonio en nuestro código tributario. Hemos aumentado el crédito tributario por hijo a 1,000 dólares por hijo. Y hemos rebajado los impuestos sobre los dividendos y las ganancias de capital. Este alivio tributario es fundamental ya que conserva más dinero en las manos de trabajadores y dueños de pequeñas empresas, y de otras personas que hacen que esta economía siga hacia adelante.

Aquí en Washington, nuestra responsabilidad es asegurar que esta economía mantenga su dinamismo, y no estaré satisfecho hasta que toda persona que quiera un empleo lo encuentre. He propuesto un plan de seis puntos para fortalecer esta recuperación y traer prosperidad a todos los Estados Unidos. En los próximos meses, seguiré trabajando con el Congreso para lograr estas importantes medidas.

Primero, será más probable que los comerciantes contraten personas si el cuidado de la salud para los trabajadores es económico. Necesitamos permitir a nuestros pequeños empresarios juntarse en planes de salud asociados, que les den el poder de compra que tienen las grandes compañías al buscar seguros de salud. Y debemos reformar el sistema de rendición de cuentas en el ámbito médico, de modo que los dólares para cuidados de salud sirvan los intereses de los pacientes y no los intereses de abogados litigantes.

Segundo, necesitamos una amplia reforma legal, a fin de que juicios frívolos no logren llevar a buenas compañías a la bancarrota ni hagan que buenas personas pierdan sus empleos. El Congreso deberá legislar una reforma de acción de clase.

Tercero, debemos reducir reglamentos y burocracia gubernamental innecesarios, de modo que los negocios pueden concentrarse en los consumidores y en sus clientes, y no en estar llenando papeles.

Cuarto, el Congreso debe legislar una política nacional de energía, de modo que comerciantes y agricultores y dueños de casa puedan contar con una fuente de energía confiable y económica, y que nuestro país tenga menor dependencia en fuentes de energía extranjeras.

Quinto, mi administración está siguiendo adelante con acuerdos de libre y justo comercio, de modo que nuestros productos y servicios puedan llegar a nuevos mercados y a nuevos clientes en el extranjero.

Sexto, debemos hacer permanente todo el alivio tributario que hemos aprobado. El alivio tributario deberá desaparecer en los años venideros a menos de que el Congreso actúe. El alivio tributario puso a nuestra economía en el buen camino, y el alivio tributario permanente la mantendrá en el buen camino.

Si seguimos hacia delante con esta agenda, podremos construir sobre la base del gran progreso que nuestra economía está logrando. Con la confianza y el trabajo duro del pueblo estadounidense, y con las políticas correctas en Washington, nos esperan días aún más alentadores para la economía estadounidense.

Gracias por escuchar.



Este documento pertenece al Gobierno de los Estados Unidos de América y se encuentra en dominio público.