Cuanto más pienso serviros
I Cuanto más pienso serviros, tanto queréis más causar que gaste mi fe en suspiros y mi vida en desear lo que no puedo alcanzar. II Bien conozco que estoy ciego y que mi gran fe me ciega, y que esperando me niega que no os venceréis de ruego, y que, por mucho serviros, no dejaréis de causar que gaste mi fe en suspiros y mi vida en desear lo que no puedo alcanzar.