Conferencia de Ernesto Zedillo Ponce de León con motivo del Día de la Libertad de Prensa

7 de junio de 1995.

En el marco del Día de la Libertad de Prensa, el Presidente Ernesto Zedillo Ponce de León concedió su primera conferencia de prensa, en respuesta a su disposición de informar amplia, puntual y periodísticamente, sobre todos aquellos aspectos bajo la esfera de su autoridad y de interés para la ciudadanía.

A continuación se presenta el texto de la conferencia, la cual se llevó a cabo en el salón Manuel Avila Camacho, de la residencia oficial de Los Pinos

El Presidente de la República: buenos días, señores periodistas. Compañeros de los medios de comunicación: hace un momento, en la ceremonia de entrega de los Premios Nacionales de Periodismo, comuniqué que la mejor manera no solamente de celebrar, sino de practicar la libertad de expresión y eso, desde el punto de vista del Ejecutivo, sería el iniciar a partir de hoy una nueva práctica en la cual, con cierta regularidad un servidor, el Presidente de la República, celebraría conferencias de prensa con nuestra fuente, así como con otros periodistas invitados para ese efecto. Así pues, los invito a que hagan sus preguntas.

El periodista Miguel Pérez, del periódico Reforma: no sé si se puedan hacer tres preguntas.

El Presidente de la República: no, una; no abuse de la libertad de expresión (risas), porque hay muchos otros compañeros en espera.

El periodista Miguel Pérez: el diálogo político nacional pareciera que está en riesgo, dado que el PRD desde hace varias semanas anunció que se retiraba de la mesa y el PAN ahora, aduciendo fraude electoral en el estado de Yucatán, amenaza también con retirarse. ¿Está en riesgo o qué llamado les haría a los partidos políticos para que no pusieran en riesgo esta situación?

El Presidente de la República: lamentablemente, desde que se suscribió aquel documento en el cual el Ejecutivo y los partidos políticos nos comprometimos a promover ese diálogo político nacional ha habido una serie de eventos de carácter político, no necesariamente vinculados a los problemas políticos nacionales, que han sido aducidos como argumento o excusa para retrasar los trabajos de este diálogo político nacional. Yo considero que esa posición es lamentable. Los objetivos del diálogo político nacional son objetivos muy claros, muy precisos, tienen que ver con la conformación de una nueva vida política y democrática en nuestro país, y que de llegarse a realizar, pues, daría respuesta a muchos de estos problemas de carácter local que ahora preocupan a los partidos políticos. En ese sentido, yo tengo mucha confianza en que a través del diálogo, de la insistencia en ese diálogo, se podrán superar estas cuestiones para que podamos regresar a la mesa del diálogo político nacional.

Creo que es necesario para el país, es necesario para los propios partidos políticos y es algo que está demandando la población.

El periodista Joaquín López Dóriga, del periódico El Heraldo de México: quisiera tratarle el tema de Chiapas. Señor Presidente, dijo usted el lunes en Chiapas que ya nadie se puede equivocar. ¿Ha habido alguna equivocación, cuál ha sido: las negociaciones sin límite del tiempo o cuál sería el tiempo? ¿Podremos vivir siempre con ese conflicto?

El Presidente de la República: yo quiero subrayar, López Dóriga, que, desde mi punto de vista, ha habido avances sustanciales durante los últimos meses en relación al conflicto de Chiapas. Quiero recordar la situación que en relación a este problema se vivió durante la segunda parte de 1994, durante los primeros días de la presente administración, quiero recordar que un servidor hizo intentos, aún antes de asumir la Presidencia de la República, para lograr el diálogo, esfuerzos que resultaron como es sabido infructuosos; que hubo intentos de establecer ese diálogo a través de otros canales institucionales del propio gobierno, que fueron infructuosos. Frente a esas circunstancias tuve que tomar decisiones sumamente graves, pero que a la postre, al parecer hicieron la diferencia, porque después de aquellos acontecimientos de febrero fue posible el empezar a desbrozar el camino hacia un proceso de diálogo y de negociación.

Hemos tenido ya varios encuentros: se tuvieron los encuentros en San Miguel, hemos tenido dos reuniones en San Andrés Larráinzar; es de esperar que hoy se empiece el tercero de esos encuentros, y toda esta panorámica de pasos que se han dado, para mí realmente son muy satisfactorios. Creo que las condiciones en relación a este conflicto son sustancialmente distintas hoy de lo que eran hace algunos meses; sin embargo, debemos reconocer muy bien la naturaleza de este problema, pensar y aceptar el hecho de que estas personas que decidieron inconformarse, apartarse del camino de ley, que hace casi una década según nos lo han dicho se fueron a la selva, a Los Altos de Chiapas, pues, tendrán que ser objeto de un proceso de diálogo y de entendimiento, de paciencia y de tolerancia dentro del marco de la ley que ahora nos ha dado el Congreso de la Unión, hecho también excepcional en México y para cualquier otro país que haya tenido un incidente o una circunstancia de esta naturaleza, y en ese sentido yo no creo que debamos ponernos fechas tajantes, fatales o terminantes. Lo que es importante es mantener la dinámica del diálogo, hacer un gran esfuerzo para que en cada reunión se logre algo -y yo espero que en esta reunión que se va a iniciar el día de hoy se logre algo que prevalezca la buena voluntad de todas las partes, por supuesto que prevalecerá la buena voluntad por parte del Gobierno Federal, espero que prevalezca la buena voluntad y la disposición al diálogo por parte del EZLN y, por cierto esto quiero subrayarlo que prevalezca la buena voluntad y la participación imparcial de las instancias que hemos aceptado como mediadoras en este conflicto.

Todo mundo tiene que poner su parte para que podamos avanzar, pero yo no voy a permitir que las acciones del gobierno se presionen por problemas de plazos o de fechas, aquí lo que es importante será el lograr resultados sólidos, resultados que nos permitan contar con una base perdurable para que el estado de Chiapas tenga la tranquilidad y las condiciones de paz social que se merece.

El periodista Juan Arvizu, del periódico El Universal: en estas fechas en que enfrentamos la crisis, en la calle y hasta en las cúpulas empresariales y obreras se habla de lo difícil que es el esfuerzo que se está llevando a cabo en este momento e, incluso, también se pide que haya otro programa de ajuste, que fuera más blando el esfuerzo de la recuperación. ¿Es posible cambiar las medidas, hacerlas más tenues, señor Presidente?

El Presidente de la República: soy muy sensible a las preocupaciones que externa la gente e, incluso, a las organizaciones representativas de los obreros, de los campesinos y de los empresarios respecto al esfuerzo que está significando el superar la crisis financiera. Hemos estado en todo momento abiertos a esas opiniones, a esos puntos de vista; sin embargo, quiero, una vez más, subrayar el hecho de que las medidas que ha tomado el gobierno, y en su momento propuesto a los sectores y al propio Congreso de la Unión, son las medidas que desde nuestro punto de vista reducen el costo social de la crisis, no la aumenta.

Si nosotros hubiésemos enfrentado con tibieza o con indecisión, con falta de firmeza la crisis, yo estoy absolutamente convencido de que en este momento las condiciones de inflación, de desempleo, de crisis financiera, serían mucho más graves para el país. Al gobierno lo que lo anima al disponer estas medidas es no solamente superar pronto la crisis, sino muy pronto lograr la recuperación de la actividad económica para posteriormente, consolidar esa recuperación y alcanzar el crecimiento sostenido y sustentable que nos hemos marcado como meta en el Plan Nacional de Desarrollo.

Es entendible que algunos sectores, las personas, desde su particular perspectiva, estén preocupadas por la situación y somos sensibles a esa preocupación; sin embargo, la responsabilidad gubernamental es el ver por el conjunto de la situación y encontrar las acciones, las medidas, los caminos que más pronto nos saquen de esta crisis. Ya en otras etapas del país, en otros momentos se pensó que era mejor ir por el camino de la gradualidad, y el resultado fue que la gradualidad perduró durante muchos años y que no se resolvieron los problemas y que el país sufrió estancamiento, inflación, profundo retraso y, por lo mismo una grave situación de injusticia social, nosotros no vamos a permitir eso.

El periodista Renato Dávalos, del periódico Excélsior: señor Presidente, mucho se ha escrito en los últimos meses acerca de su relación con el ex Presidente Carlos Salinas de Gortari. Yo quisiera que nos explicara, nos detallara ¿cuál es la relación que existe con él, si es que la hay, y si en su administración hay líneas de investigación penal, si es que las hay, en las que él esté involucrado?

El Presidente de la República: no tengo ninguna relación, de ninguna índole, con el señor licenciado Salinas, esa sería la respuesta clara a su primera pregunta. Respecto a la segunda parte, déjeme decirle dos cosas: en primer lugar, que desde que nombré al señor Procurador Antonio Lozano le expresé no solamente mi más firme respaldo institucional para que cumpla su trabajo, sino que le dije que estaba en total libertad para proceder en las investigaciones de cualquier caso penal, conforme a los criterios que considere adecuados la propia Procuraduría, con el fin único de encontrar la verdad y de procurar la justicia.

Al día de hoy el señor Procurador no me ha informado si dentro de esas líneas de investigación que está persiguiendo con toda libertad y con todo el respaldo del Presidente de la República, sean conducentes a la situación que usted describió en su pregunta.

El periodista Dante Limón, de la revista Epoca: señor Presidente, yo quisiera una opinión sincera y crítica de su parte, ¿de qué tan bien o mal, qué tan poco o mucho se ejerce en México lo que llamamos libertad de expresión?

El Presidente de la República: bueno, muy a tono con el día. Yo creo que en México hay plena libertad de expresión. Todos los días la disfrutamos, la gozamos y a veces la sufrimos, y creo que eso es muy bueno para el país. Considero que es una garantía fundamental de la que sí gozamos los mexicanos. Me extraña mucho cuando veo escritos u opiniones en el sentido de que en México se limita la libertad de expresión, y debo decirle que esto no es nuevo.

Yo desde que era pequeño percibía, a través de la lectura de las revistas que llegaban al hogar familiar, que en México había y hay, sin duda, ahora libertad de expresión.

Es un tema de gran controversia: hemos escuchado en semanas recientes, como en otras épocas, acerca de la necesidad de regular la libertad de expresión. Ante esas expresiones, yo dije, escribí en el Plan Nacional de Desarrollo que desde el punto de vista del Ejecutivo entraña muchos más riesgos que posibles beneficios el pretender regular la libertad de expresión.

Tienen razón algunas personas cuando señalan que hay momentos excepcionales afortunadamente, en los cuales se cometen abusos y a veces lamentablemente, pero subrayo son momentos o hechos excepcionales, incluso se calumnia a la gente, yo mismo debo decir que en algunos momentos he sido objeto de calumnias. No hace muchas semanas una revista de circulación nacional me calumnió a mí a mi campaña política, y eso, para mí, en mi conciencia me pareció un hecho muy grave. Debo decirle que ni siquiera he recibido una carta de disculpa por esa situación, pero prefiero la tolerancia frente a ese tipo de hechos, que el impulsar el que se norme algo que, desde mi punto de vista, por definición no se puede normar, que es la libertad. Una vez que empecemos a normar la libertad de expresión, quiero saber quién va a trazar la línea entre lo que es verdadera libertad de expresión, o pretender controlar fenómenos que, ciertamente, son inconvenientes que, ciertamente, trasgreden el espíritu constitucional en el Artículo 6º. pero que podríamos estar tomando un riesgo sumamente grave.

El periodista Marcelino Bandala, de Agencia NOTIFAX: señor Presidente, usted ha hablado de una reforma del Estado casi definitiva. ¿Hasta dónde permitirá usted, señor, que el Partido Revolucionario Institucional realmente vuelva a ser lo que se llama un partido político? es decir, ¿se van a contemplar sólo cuestiones electorales o se va también a tocar la cuestión de la relación del estado, o el gobierno con el Partido Revolucionario Institucional.

El Presidente de la República: creo que son dos temas, pero como usted sugiere, son temas que se interrelacionan. Nosotros hemos propuesto claramente una reforma para fortalecer nuestra vida democrática, y un elemento fundamental de esa reforma es el de construir un vigoroso sistema de partidos, y aquí un sistema de partidos es un ancla, una palanca, un instrumento fundamental de cualquier democracia, y un sistema vigoroso de partidos quiere decir un sistema donde hay auténtica y equitativa competencia política. Dicho eso, sin duda, para que haya esa reforma política y ese sistema de partidos, todos los partidos deben reformarse para estar a tono con esas condiciones de competencia política y, ciertamente, dentro del espectro de partidos políticos en México, uno muy importante -el más importante, atendiendo a su representatividad electoral es mi Partido, es el Partido Revolucionario Institucional, y creo que por lo mismo el PRI es el primer obligado a llevar adelante una profunda reforma interna. Así lo propuse, para eso trabajé desde que era Presidente electo; incluso, encabecé trabajos conducentes a esa reforma de mi Partido. Dejamos lista, a partir de un foro que constituimos dentro del Partido, una agenda bastante sustanciosa y ambiciosa para la reforma del Partido.

Entiendo que el Partido está trabajando hacia la concreción de esa agenda para la reforma, tiene todo un programa de trabajo, y el reto principal que debe abordar el Partido, el PRI, como los otros partidos, es ponerse en circunstancias para competir, bajo condiciones mucho más equitativas, en el nuevo ambiente de competencia y de disputa legítima, legal, por el poder en México.

Creo que esta cuestión no es privativa del PRI, todos los partidos tienen que hacer un gran esfuerzo para superar esta etapa que se está terminando de partido dominante, sin duda, donde todavía no acabamos de perfeccionar las reglas para garantizar una competencia equitativa y que estén, cuando logremos esa reforma en condiciones de competir con éxito, espero que con éxito relativo. El periodista Emilio Lomas, del periódico La Jornada: señor Presidente, el día de antier en su edición el The New York Times, menciona que los ejércitos mexicanos y estadounidenses están trabajando coordinadamente en Chiapas y disculpe el abuso, Presidente, ¿se va a llegar hasta las últimas consecuencias, en los crímenes políticos? Gracias.

El Presidente de la República: no conozco esa noticia, la voy a leer con mucho interés, pero la desmiento categórica y absolutamente, es falso.

Sobre el segundo punto, lo reafirmo: el gobierno tiene la responsabilidad constitucional de procurar la justicia, en esos casos, que tanto nos han dolido y dañado a los mexicanos y en cualquier caso de justicia criminal, y desde el primer momento he instruido enfática, categóricamente al Procurador General de la República para que actúe sin ninguna restricción en la procuración de la justicia en éstos y en cualquier caso que se le pueda presentar en el ejercicio de sus responsabilidades.

Pregunta: (no se identificó) señor Presidente, ¿cómo calificaría la relación del gobierno con el PAN y cómo calificaría también la actitud de este Partido ante los resultados de los comicios en Yucatán?

El Presidente de la República: la actitud entre el gobierno y el Partido de Acción Nacional ha sido una actitud de respeto recíproco. Considero yo que es la relación que queremos y debemos tener con todos los partidos políticos. A ustedes les consta que desde los primeros días del gobierno hemos mantenido una política de comunicación abierta con todos los partidos políticos, con los legisladores de todos los partidos políticos, y ése es el trato que hemos tenido con el Partido de Acción Nacional, y ha sido un trato que hasta ahora ha sido bien correspondido.

Debo decir, sí, con todo respeto, que la actitud que ha tomado el Partido de Acción Nacional en relación a las elecciones de Yucatán, la encuentro un tanto cuanto desconcertante: encuentro cierto apartamiento o cierto desapego a la tradición democrática que con tanta firmeza, claridad y valentía ha sostenido históricamente este Partido político. Yo espero realmente que a través de los cauces legales que están previstos en la Ley Electoral del Estado de Yucatán, se disipen estos motivos de enojo o de molestia, pues, que francamente han conducido, desde mi punto de vista, indebidamente a expresiones que no están justificadas; pero, en todo caso, el juzgar las elecciones de Yucatán, corresponde al Tribunal Electoral del Estado. Es en esa instancia donde habrá de resolverse cualquier queja de los partidos que han participado en esa elección.

En lo que a mí se refiere, ateniéndonos a la información oportuna que tuvimos, derivada de encuestas antes de las elecciones, durante las elecciones, a los reportes que tuvimos durante el día de la elección en el estado de Yucatán a los hechos que conocemos, a la información que nos han dado todos los partidos políticos, ese proceso ha sido un proceso adecuado, ha sido un proceso que no debiese conducir a estas expresiones tan desafortunadas.

El periodista Javier Ortiz, del periódico Novedades: señor Presidente, buenos días. Nos comentó ya su relación con el licenciado Salinas, ¿qué nos puede comentar al respecto con el licenciado Camacho Solís, tomando en cuenta que el año pasado al parecer hubo un distanciamiento entre ustedes dos?

El Presidente de la República: el licenciado Camacho me ha hecho dos o tres visitas de cortesía, en las cuales hemos charlado brevemente y en ese sentido hay esa relación. . . un cafecito, ¿no?

Señor Víctor Manuel Suberza, de Radio Red: yo quisiera volver a la pregunta de Renato: hay inconformidad en un gran sector de la población, si no por la gestión, sí por su antecesor. ¿Qué le puede decir el Ejecutivo de la Unión a esos mexicanos que están inconformes, si no por la gestión, sí por su antecesor?

El Presidente de la República: no le entiendo. A ver otra vez, explíquemela bien.

El periodista Víctor Manuel Suberza: usted es sensible a las preocupaciones, decía en una respuesta anterior. Es un clamor popular la inconformidad que hay respecto insisto, no por la gestión, no por lo hecho en el sexenio, no ponen a discusión la gestión, el sexenio anterior sí en contra de Carlos Salinas de Gortari, no sé si usted no se habrá percatado de ese tipo de versiones. A esos mexicanos que están inconformes por Carlos Salinas de Gortari, ¿qué les puede decir el Presidente de la República?

El Presidente de la República: que están en total y absoluta libertad de evaluar, de juzgar, de emitir opiniones sobre cualquier funcionario público o ex funcionario público, están ejerciendo su libertad de expresión.

El periodista Salvador Martínez, del periódico Excélsior:, señor Presidente, yo quiero preguntarle en torno a una situación económica que está alterando la evolución y la estabilidad, que es la situación de los bancos, que se dice que están en una situación muy precaria económicamente, que están al borde de la quiebra e, incluso, esto ha repercutido en cuanto a la recuperación del peso frente al dólar. Se habla también de un préstamo del Banco Mundial para fortalecer esta situación. ¿Qué hay de esto, y hasta dónde sí hay riesgo de que esta estabilidad que vamos poco a poco recuperando se pueda perder?

El Presidente de la República: desde 1994 algunos bancos habían venido presentando problemas en la salud de sus carteras y en el dinamismo de su captación de recursos. Al sobre venir la crisis el pasado mes de diciembre algunos de estos problemas se acentuaron; sin embargo, una de las tareas a las cuales se abocaron desde el primer momento las autoridades financieras fue hacer cualquier cosa que sea necesaria e indispensable para garantizar que los bancos en todo momento honraran las obligaciones que tienen con el público y con quienes invierten sus recursos, y que tendrán los suficientes recursos de capital para funcionar normalmente como instituciones financieras. Estas circunstancias han sido referidas o han ocurrido no en los bancos más grandes y más importantes del país, afortunadamente, eso supone y nos permite el tener la suficiente capacidad para respaldar las acciones de los bancos y evitar cualquier quebranto que pudiesen agravar los problemas financieros del país. En ese sentido, puedo afirmar categóricamente que nuestro sistema bancario, nuestro sistema financiero es claramente solvente, y que no escatimaremos esfuerzos para respaldar esa solvencia.

Afortunadamente, además, estamos viviendo una gran iniciativa por parte de los accionistas de esos bancos para procurarse recursos de capitalización y así evitar mayores quebrantos. La semana pasada, por ejemplo, un banco de importancia nacional anunció una nueva operación, mediante la cual va a ser capitalizado con inversión extranjera, en términos de la ley que fue reformada por el Congreso de la Unión apenas el pasado mes de febrero.

El periodista Manuel Moreno, del periódico El Financiero: en primer lugar le agradezco esta deferencia que tiene para con nosotros, a nombre de mi medio y en lo personal, de que inaugure este ciclo de conferencias. Muchas gracias.

Mi pregunta es ésta: después de la reaparición pública del licenciado Camacho en la presentación del Plan Nacional de Desarrollo se especuló mucho; incluso en sus palabras hizo un llamado a unirse en torno de su gobierno. La pregunta es muy sencilla: ¿usted tiene pensado invitarlo a su gabinete?

El Presidente de la República: debo decirle, con toda franqueza, que ahorita no hay vacantes en el gabinete y, por lo mismo, no he pensado en eso.

La periodista Margarita Betanzos, de Radio Fórmula: con referencia a lo del gabinete presidencial, en los últimos días se ha hablado, se ha rumorado mucho de que va a haber cambios en él. Teniendo la oportunidad de tenerlo a usted aquí ¿es cierto que va a haber cambios? ¿de ser así para cuándo se prevén?

El Presidente de la República: no he pensado en este momento cambios en el gabinete. He leído algunas expresiones en ese sentido y quiero desmentirlas categóricamente.

El periodista Fernando Sánchez Márquez, de la agencia NOTIMEX: concretamente se ha comentado mucho un punto que mantiene inquietos a los funcionarios, a los Secretarios de Estado, que es en relación a la nueva responsabilidad que adquirirá la Secretaría de la Contraloría. En este punto, en primer lugar, ¿ésta se reforma? ¿sus atribuciones se trasladan a la Contaduría Mayor de Hacienda y, efectivamente, serán ampliadas a la vigilancia puntual, como usted lo ha mencionado, del Legislativo y Ejecutivo?

El Presidente de la República: en este punto lo que yo tengo muy claro es que las formas vigentes de control del Ejecutivo no son las más adecuadas, y prueba de ello es que subsisten fallas, actos que son indebidos, actos de corrupción, en algunos casos, de la administración pública, y por eso nos hemos pronunciado por una reforma que modifique la manera de cómo se fiscaliza el Ejecutivo Federal. No tenemos una opinión concluyente o definitiva al respecto, porque en esta materia es muy importante que escuchemos los puntos de vista de toda la sociedad, de los miembros del Poder Legislativo; que incluso estudiemos los modelos que han sido aplicados para este propósito en otros países con éxito. Lo que dice el Plan Nacional de Desarrollo es básicamente lo que acabo de expresar: estamos no solamente dispuestos, sino queremos que haya una nueva forma de fiscalización del Ejecutivo en nuestro país. Lo que esboza el Plan es simplemente una serie de criterios para orientar este debate, este análisis. En pocas palabras, habría dos modelos. Uno sería el otorgarle prácticamente en exclusividad a la Contaduría Mayor de Hacienda esa facultad de fiscalización claro está que sin que el gobierno deje de tener instrumentos de control interno; siempre el Presidente y los funcionarios de alto nivel necesitamos instrumentos para saber que los funcionarios de segundo y tercer nivel no cometan cuestiones indebidas y el otro modelo sería, como existe por ejemplo en Francia, un órgano de fiscalización superior, que tiene la ventaja de no politizarse y de también fiscalizar al Poder Legislativo, pero eso es algo que está abierto a discusión, análisis y debate.

El periodista Ricardo Trejo, de Enfoque-Núcleo Radio Mil: mi pregunta es ésta: existe inconformidad entre ciertos sectores de la población por los incrementos en productos, así como servicios, además de que hay muchos desempleados en el país: ¿no existe temor en la autoridad por algún estallido social generalizado en el país debido a esta situación?

El Presidente de la República: estamos haciendo todo lo posible para superar lo más pronto esta emergencia económica, que sabemos que ha supuesto lo que usted mencionaba inflación y desempleo muy graves y por eso la urgencia de aplicar con toda disciplina y con todo vigor estas medidas, que nos permitan superar la emergencia y alcanzar la recuperación. En ese punto es muy importante aclarar algo: se habla con frecuencia del costo social del programa de ajuste. Yo no estoy de acuerdo con esa expresión. Hay un costo social de la crisis. Una vez que estalla la crisis, una vez que se nos viene encima la crisis de balanza de pagos, la salida masiva de capitales del exterior que habían venido a México y que se retiran del país: que hay la devaluación, que hay una astringencia inevitable de crédito en el corto plazo en la economía, entonces hay que tener un programa de ajuste, pero los costos vienen de la crisis, de los factores que causaron en primer lugar la crisis, no del Programa de Ajuste. Entonces, lo que ha procurado el gobierno, y seguirá procurando, es aplicar el Programa de Ajuste que, desde nuestro punto de vista, minimiza los costos sociales de la crisis y nos permite salir más rápido de la propia crisis. Hemos, por otro lado, dentro de las restricciones que enfrentamos, procurado varios programas para paliar, para aminorar, aunque sabemos que no se pueden corregir en el corto plazo, esas manifestaciones tan difíciles que ha traído consigo la crisis. Así hemos introducido programas emergentes de empleo, programas especiales de gasto regional, reforzado algunos programas de abasto popular. Estamos cada día planteándonos, en la medida de nuestras posibilidades, qué acciones adicionales llevamos a cabo para que sin cuestionar la viabilidad del Programa de Ajuste, que es lo que nos va a sacar de esta situación, podamos ir mejorando la del empleo y aminorar los impactos inflacionarios de la crisis.

La periodista Alejandra Tejeda, de TV Cable: quisiera saber ¿cuál es la evaluación que hace en relación a los trabajos del Legislativo, pese a los reclamos que ha hecho la oposición, en el sentido de que está legislando al vapor y bajo los tiempos del Ejecutivo?

El Presidente de la República: es un asunto del Poder Legislativo, definitivamente, pero déjeme decirle que en muchos de los asuntos legislativos que ha sometido a consideración el Ejecutivo, hemos encontrado no sola mente el conocimiento sino la participación activa de distintos partidos políticos. Ha habido sí asuntos que se han resuelto únicamente por el voto de la mayoría, pero la generalidad de los asuntos han llevado siempre la participación e incluso el voto favorable de otros partidos políticos.

El periodista José García Segura, del periódico El Día: ¿hasta dónde abarcan las investigaciones de los asesinatos políticos? ¿se presume alguna relación o algún vínculo de Manuel Camacho Solís con el EZLN y con el ex Presidente Carlos Salinas de Gortari?

El Presidente de la República: las investigaciones deben abarcar hasta donde sea necesario para lograr dos cosas: conocer la verdad y procurar la justicia. El Procurador General de la República lo sabe perfectamente bien. No debe enfrentar ninguna restricción, ninguna limitación para proceder en sus investigaciones. Esa ha sido la condición desde el 1o. de diciembre y seguirá siendo la condición durante todo el tiempo que sea necesario. Respecto a la segunda parte de su pregunta, no tengo información que sustente de modo alguno esa afirmación.

El periodista Hilario Monroy, del periódico Uno más Uno: en ese sentido, si no hay limitaciones en las investigaciones de los crímenes políticos, ¿se podría llegar incluso al señor José Córdoba Montoya? la gente dice que a él también se le debe investigar.

El Presidente de la República: para mí lo que cuenta es lo que diga el Procurador, que es el responsable constitucional, y reitero que no tiene restricción alguna para proceder con su trabajo. Y es muy claro. No ha habido en ningún momento -y ustedes se lo pueden preguntar al señor Procurador General de la República ninguna insinuación, ninguna solicitud, ninguna petición por parte del Presidente de la República o por parte de cualquier funcionario del gobierno, para que se autolimite en su trabajo. Por lo demás, debo decir que estoy profundamente satisfecho del trabajo que ha hecho hasta ahora el señor Procurador General de la República.

Pregunta: (no se identificó por su nombre)

Reiterando lo mismo: ¿esto podría en un momento llevarnos . . .?

El Presidente de la República: con mucha claridad le digo que yo no entro al terreno de las hipótesis. Yo establezco que el gobierno va a cumplir en todo momento la ley y que el Procurador no tiene ninguna restricción. Aquí estamos buscando dos cosas: la verdad y la procu- ración de justicia. No le corresponde al Ejecutivo la aplicación de la justicia. Ya será el Poder Judicial el que lo haga. Quiero ser absolutamente claro en eso: en México no hay intocables.

El periodista Eduardo Ruiz Healy, de Radio Fórmula: este evento es como algún albur, dirían algunos. Durante años en muchos países se ha discutido la conveniencia o no conveniencia de este tipo de conferencias porque algunos dicen que afectaría mucho al Presidente. Otros dicen que es el mejor camino para que el Presidente esté en constante contacto con la opinión pública. ¿Por qué la decisión? ¿van a seguir cuando los tiempos sean difíciles que es cuando a veces se recluyen los jefes de gobierno?

El Presidente de la República: le digo a mi amigo Ruiz Healy que los tiempos no estén más difíciles que ahora. No me eche la sal. Quisiera reafirmar que con esta reunión podamos establecer una práctica que sinceramente creo yo que fortalece el escrutinio por parte de los ciudadanos hacia el gobierno y, por lo mismo, fortalece la vida democrática del país. Algunas veces no nos saldrán muy bien las cosas a mí o a ustedes, pero juntos vamos a ir aprendiendo y ojalá que todos hagamos el mejor esfuerzo para que esto se finque como una sólida tradición de nuestra vida política y para ustedes de su vida como informadores.

El periodista José Cárdenas: (inaudible)

El Presidente de la República: se brincó su turno, pero se la contesto. Claro que sí, señor Cárdenas. Se los he pedido. Incluso usted habrá notado que en los últimos días, con motivo de la publicación del Plan Nacional de Desarrollo les he solicitado, ordenado a mis colaboradores, que estén disponibles para entrevistas, para comentarios y para conferencias de prensa, y tengo entendido que varios de los miembros del gabinete han dado este tipo de conferencias durante los últimos días.

El periodista Miguel Angel Ramírez, del periódico El Nacional: señor Presidente: ¿se prevé una reforma a la Ley Federal del Trabajo en este año? ¿de llevarse a cabo con qué fin se haría?

El Presidente de la República: he escuchado en los últimos días voces de preocupación respecto a lo que llaman una propuesta gubernamental para reformar la Ley Federal del Trabajo. De hecho hoy en algunos de sus medios se destacan mucho algunas expresiones del Congreso del Trabajo. Yo quiero ser muy claro en este punto. Lo que dice el Plan Nacional de Desarrollo es: número uno, que el país necesita generar muchos más empleos. Cada año crece la población económicamente activa en un millón de personas. Número dos, que hay condiciones en nuestro mercado de trabajo, en el funcionamiento de los mercados laborales, que no nos permiten la máxima absorción posible de esa fuerza de trabajo, y que incluso, existen impedimentos para que aumente la productividad y aumenten, por lo mismo, los salarios reales de los trabajadores. Por lo tanto el Plan Nacional de Desarrollo convoca a todas las partes interesadas a que abramos una discusión franca, muy objetiva, sobre el funcionamiento de los mercados laborales, sobre la justicia laboral, sobre todos aquellos aspectos que puedan influir en la absorción de la fuerza laboral, en la productividad y en las remuneraciones reales. Incluso hemos subrayado el hecho de que estos análisis deben ser de carácter tripartita, y además, como lo hice desde que era candidato a la Presidencia de la República, hemos establecido allí el principio de que cualquier transformación deberá ser, a la postre, en beneficio de la clase trabajadora del país. Es todo lo que el gobierno ha dicho. Yo no creo que se le pueda criticar al gobierno pedir que se discutan estos factores. Y estamos realmente convencidos de que debe darse esta discusión. Que derive o no en propuestas tripartitas para reformar la Ley Federal del Trabajo, sería totalmente prematuro decirlo en este momento.

La periodista Lenika Avila, de Radio Educación: tengo una inquietud respecto al ahorro interno, se ha convertido en algo así como la espina dorsal de su política económica para alcanzar el crecimiento, sin embargo, además de todas las reformas tributarias que puedan darse para generar el ahorro público, hay gran inquietud en la población, por saber de qué forma pueden contribuir en este ahorro interno ante el desempleo, ante la pobreza que viven y ante el mismo endeudamiento interno que vivimos. Gracias.

El Presidente de la República: si queremos que crezca nuestra economía, pues necesitamos inversión; es decir, apartar una porción de los recursos del país para destinarlos a las fábricas, a la infraestructura, a las instalaciones, pero eso significa, también, que para que haya inversión tiene que haber ahorro. Ahora bien el ahorro tiene que venir tanto del sector público, como del sector privado. En el pasado el sector público no ha tenido ahorro, y eso ha derivado en crisis, aunque el sector privado tenga ahorro. En otros momentos el sector público ha tenido ahorro, como en el sexenio pasado, pero el sector privado disminuyó drásticamente su tasa de ahorro, y eso nos condujo a la crisis financiera que hoy estamos sufriendo. Ningún país se ha desarrollado, ni ha crecido, si no se ha marcado como propósito nacional el tener un enorme esfuerzo de ahorro y de inversión internas y en ese sentido si queremos crecer, si queremos tener los recursos para desplegar una política social más ambiciosa, para que haya condiciones sociales conducentes a la justicia y a la legalidad, conducentes a la democracia, pues tenemos que tener como propósito nacional el crecer y por lo menos ahorrar e invertir.

Yo creo que no va a ser difícil que la economía mexicana se recupere, en 1996 vamos a tener una recuperación en la medida en que controlemos los aspectos más abruptos y negativos de la crisis. El verdadero reto se va a dar en lograr que esa recuperación sea sostenida y se mantenga durante muchos años. En tal virtud el esfuerzo de ahorro adicional que se le va a pedir a la gente habrá de ocurrir, precisamente, cuando ya la economía se esté recuperando, lo que no queremos es que cuando venga la recuperación nos pongamos otra vez sumamente optimistas y botemos por la borda el esfuerzo de combate a la crisis, sino que una vez que se dé la recuperación, en ese momento se reafirme el propósito nacional de tener una economía en crecimiento y que a partir de un amplio consenso social convengamos las acciones que sean necesarias para mantener y elevar el ahorro y la inversión nacional. La periodista Elena Gallegos, del periódico La Jornada: señor, hoy se publica una información en el sentido de que usted se reunirá con Porfirio Muñoz Ledo, Quisiéramos saber ¿si esto es así, cuál es el objetivo? y ¿cuál es su opinión sobre el retiro del PRD de la mesa de negociación de la Secretaría de Gobernación? El Presidente de la República: no tengo en este momento programada ninguna reunión con el licenciado Muñoz Ledo, pero en el momento en que se plantee, y dependiendo de los términos para los que se plantee esa reunión, pues, con mucho gusto la tendremos. Pero no conocía esa información, debo decirle con toda franqueza. El periodista Armando Cruz, del Diario de Monterrey: para preguntarle a ¿cuánto asciende la deuda externa de México, en estos momentos? y ¿si esta deuda es manejable enmedio de esta crisis económica y de carencia de recursos en el país? El Presidente de la República: bueno, mire, no me sé la cifra exacta, porque no puedo tener todas las cifras exactas en mi cabeza, lo que le puedo decir y eso sí lo revisé en los últimos días es que afortunadamente en el curso de lo que va del año hemos podido reducir las obligaciones denominadas en moneda extranjera, tanto del sector público, como del sector privado mexicano. Y déjeme darle dos o tres datos que respaldan esa afirmación, el saldo, por ejemplo de los TESOBONOS, que son obligaciones denominadas en moneda extranjera y en una gran proporción en manos de extranjeros, tenían un monto de 29 mil millones de dólares a fines del año pasado, hoy ese monto está cercano a los 11 millones de dólares; es decir, que ha habido una reducción, nada más por ese concepto, pues casi de 18 mil millones de dólares. Tengo también, recuerdo información de las obligaciones de la banca mexicana, de la banca comercial del país denominadas en monedas extranjeras, que durante el primer trimestre del año se redujeron en algo así como dos mil 300 millones de dólares y también obligaciones de empresas mexicanas en moneda extranjera que se redujeron en algo así como mil 400, por ahí está Téllez. Téllez ¿te acuerdas? como en mil 400 millones de dólares durante el primer trimestre del año. Esto quiere decir que la reducción en las obligaciones ha sido mayor que la contratación de nuevos créditos, y en ese sentido la deuda externa, la deuda denominada en moneda extranjera del país se ha reducido durante los primeros meses del año. Eso ha sido parte del proceso de ajuste, además, hay que tomar en cuenta que la deuda interna también se ha reducido, entonces curiosamente para algunos, deliberadamente para quienes hemos trabajado en este Programa de Ajuste, uno de los resultados que tendremos al final de este proceso, pues, es un sector público y un sector privado mucho menos endeudado, que eso será una base precisamente para la recuperación. El periodista Miguel Angel Torres, del Periódico La Tarde, Baja California: quisiera preguntarle esto: la eterna excusa del gobierno del estado, y los municipales de que las participaciones federales no les alcanza para hacer obras. Yo quisiera preguntarle ¿cuál es la estrategia que va a seguir su gobierno en este sexenio, para otorgar las participaciones federales a los estados donde están padeciendo de estas carencias? El Presidente de la República: nosotros hemos propuesto de tiempo atrás y así lo he reafirmado en el Plan Nacional de Desarrollo, la conformación de un nuevo federalismo. Esto significa que debe haber una distribución más equilibrada de recursos y lo siguiente lo subrayo, también, de responsabilidades entre los tres órdenes de gobierno. Este proyecto, esta propuesta, si se traduce primero en un acuerdo político y después en actos de gobierno, deberá llevarnos a conformar un nuevo pacto federal, en el que responsabilidades que hoy tiene el Gobierno Federal, junto con los recursos que hoy utiliza el Gobierno Federal para cumplir con esas responsabilidades sean transferidos a los otros órdenes de gobierno. Ahora, quiero ser particularmente enfático en señalar que este asunto, pues, tiene dos caras, porque con frecuencia escucho reclamos de autoridades de otros órdenes de gobierno, en las que simplemente dicen: pues queremos más recursos. Bueno, eso es muy importante, muy legítimo, pero es incompleto, con los recursos deben ir las responsabilidades, porque los recursos que hoy tiene el Gobierno Federal, pues no se destinan, sino en buena medida a satisfacer necesidades sociales que son muy apremiantes; no podría el Gobierno Federal despojarse de los recursos que están bajo su administración, sin alguna consideración en torno a las responsabilidades, porque entonces qué pasaría, con qué vamos a pagar el gasto educativo, con qué vamos a pagar el gasto en salud, el gasto en seguridad nacional, en procuración de justicia. Tenemos que hacer una distribución equilibrada y equitativa de esta materia, pero estamos absolutamente de acuerdo en que tiene que haber esa redistribución de recursos, pero también de responsabilidades hacia los otros órdenes de gobierno. El periodista Guillermo Ortega, de TELEVISA: yo quisiera preguntarle acerca de una práctica que se ha vuelto cotidiana en la capital de la República con la afectación de la vida y de las actividades cotidianas de decenas de miles de personas, ya de por sí agobiadas por la situación que estamos viviendo todos. Los blo- queos señor, los bloqueos de calles y de instituciones. No hace muchos días en lo que a mí me pareció un claro afán de provocación, los accesos a esta casa presidencial, estuvieron bloqueados, por no hablar de la afectación durante horas a muchos miles de personas. La pregunta es: ¿hasta dónde se va a permitir que con la excusa de ejercer una libertad, que es la de manifestación se afecte otra libertad u otras libertades de las mayorías que se ven imposibilitadas para transitar libremente en nuestra ciudad capital?

El Presidente de la República: bueno, este es un tema muy importante, pero es un tema en el cual desgraciadamente nuestro marco jurídico presenta algunas deficiencias y faltas de precisiones. En este momento si nos atenemos a la legislación vigente esas personas que se manifiestan, pues, están en su derecho de hacerlo, y la legislación vigente no tutela el derecho de terceros, pues, a no verse afectados por estos bloqueos o por estas manifestaciones. En tal virtud, sólo en casos extremos, verdaderamente extremos de tiempo la autoridad ha tomado la decisión de impedir o de corregir esos bloqueos. Considero que éste es un tema pendiente de debate y de legislación, ha habido varios intentos fallidos, tanto en el Congreso de la Unión, como en la propia Asamblea de Representantes, pero entiendo que siempre se llega a ese dilema de cómo regular o coartar en su caso, verdad, este aspecto de la libertad de expresión. El gobierno seguirá, por lo pronto, mientras subsista este marco jurídico, bajo el criterio de ser respetuosa de la libertad de expresión, pero en casos, en momentos extremos, tomará las medidas que sean conducentes para que la afectación de derechos de terceros, pues, no llegue a extremos que a veces son verdaderamente alarmantes y preocupantes. El periodista Daniel Flores Meneses, de TELEVISA: señor, usted iniciará una gira a Centroamérica, a Guatemala; los guatemaltecos, el gobierno de Guatemala pide un trato igual de sus indocumentados en México, como usted lo pide igual de los mexicanos en Estados Unidos. ¿Puede dar su punto de vista? El Presidente de la República: tienen toda la razón, así lo expresé en la gira que hice como Presidente electo a Guatemala, y somos muy sensibles a ese reclamo, tienen razón nuestros hermanos de Guatemala de quejarse de arbitrariedades, de abusos de violación de derechos humanos, y de actos de corrupción, que no siempre, pero en algunas ocasiones han sufrido por parte de autoridades mexicanas y una de las causas que tengo para hacer este viaje es precisamente refrendar este punto de vista, y traducirlo en hechos de colaboración y de cooperación entre los dos países para erradicar esas prácticas que tanto nos avergüenzan a los mexicanos.

El periodista (inaudible) de la XEX: yo quisiera preguntarle señor, hablaba usted hace un momento del esfuerzo de ahorro adicional que se le va a pedir a los mexicanos. Yo quisiera que nos detallara ¿cómo se le va a pedir ese esfuerzo de ahorro adicional? sobre todo porque la mayor parte de la población no tiene ninguna capacidad de ahorro.

El Presidente de la República: bueno, mire usted, corresponderá a los foros especializados, a las instancias correspondientes el ir conviniendo, consensando las medidas para lograr el mayor ahorro nacional. En el Plan hablamos de que es necesario el llevar a cabo reformas tributarias, reformas financieras, reformas a nuestros sistemas de seguridad social y el Plan establece algunos criterios algunos principios conducentes a este propósito. Corresponderá, reitero, a otras instancias y a otros foros el ir detallando los acuerdos en torno a ese objetivo.

Por otra parte, sin embargo, quiero, si a usted le parece bien diferir un tanto cuanto con la idea de que en la crisis o en la normalidad los mexicanos no ahorran, eso no es cierto, y curiosamente a veces quienes más ahorran es la gente con menos recursos; si usted se asoma, como estoy seguro que lo hace, con frecuencia a los asentamientos humanos irregulares donde vive la gente, por lo menos en el medio urbano más pobre, usted ahí puede observar un claro efecto de ahorro por parte de esa población, esa gente está destinando a veces hasta la mitad de su ingreso disponible para hacerse de un activo, para hacerse de una casa y eso no es otra cosa, sino ahorro. Lo que sucede es que nuestro sistema tributario, nuestro sistema financiero no tiene las características adecuadas para captar mejor y hacer rendir mejor y canalizar mejor ese ahorro. Es realmente equívoco el pensar que no se ahorra simplemente porque el ingreso es bajo. En ocasiones la tasa proporcional de ahorro de la gente que tiene menos ingresos es más alta que la tasa de ahorro de los ricos; entonces debemos de tener eso muy claro en las reformas que habrán de promoverse próximamente.

Muchas gracias.

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