Carta de Micaela Bastidas a Túpac Amaru II
Chepe mío, tú me has de acabar de pesadumbres, pues andas muy despacio paseándote en los pueblos y mas en Yauri, tardándote dos grandes días con gran descuido, pues los soldados tienen razón de aburrirse irse cada uno a sus pueblo Yo ya no tengo paciencia para aguantar todo esto, pues yo misma soy capaz de entregarme a los enemigos para que me quiten la vida, porque veo el poco anhelo con que ves este asunto tan grave que corroe con detrimento la vida de todos.
Estamos en medio de los enemigos, no tenemos segura la vida y por tu causa a pique de peligrar todos mis hijos, los demás de nuestra parte… Bastante advertencia te di, para que inmediatamente fueses al Cuzco pero has dado todo a la barata, dándoles tiempo para que se prevengan como ya lo han hecho.
— Micaela Bastidas Puyucahua.