Cancionero (Petrarca)/Tan breve el tiempo es y el pensamiento

Tan breve el tiempo es y el pensamiento
que me figuran mi señora muerta,
que no encuentro a mi pena cura cierta;
si bien, mientras está, ningún mal siento.

Amor, que aprieta el lazo y da tormento,
tiembla cuando la ve sobre la puerta
del alma en que me mata, aún alerta,
dulce en la vista y suave en el acento.

Como amo con su hacienda se comporta,
desterrando del alma triste mía
con la frente serena mis enojos.

El alma, que luz tanta no soporta,
suspira y dice: «¡Sea bendito el día
que abriste este camino con mis ojos!»