Ansiedad (Méndez Ramos)

Ven, amada;
anhelante mi espíritu te llama

En la fuente piadosa de tus labios
apagaré mi sed,
y bendita serás como la dulce
samaritana bíblica.

¡0h, mi sed de ternura!
Ven, amada;
anhelante mi espíritu te llama.