Al Santísimo nombre de Jesús
Sagrado Redentor, y dulce Esposo, peregrino, y supremo rey del cielo, camino celestial, firme consuelo, amado Salvador, Jesús gracioso: Prado ameno, apacible, deleitoso, fino rubí engastado, fuego en hielo, divino amor, paciente y santo celo, dechado perfectísimo y glorioso: Muestra de amor y caridad subida diste, Señor, al mundo haciéndoos hombre, tierra pobre, y humilde a vos juntando, Venistes hombre, y Dios, amparo y vida, nuestra vida y miseria mejorando; encierra tal grandeza tal renombre.