A una mujer entrada ya en edad

A una mujer entrada ya en edad
de Gaspar María de Nava Álvarez


 Esa cabeza erguida y orgullosa,   
 ese ademán altivo y lengua vana   
 eran muy buenos en la edad lozana   
 cuando el jazmín reinaba con la rosa.   
 

 Ahora amarillez, ruga enojosa  
 invaden tu belleza soberana   
 y en tus ralos cabellos ya la cana   
 ejercen su potencia rigurosa.   
 

 ¡Mira cómo dejaron tu semblante   
 las voraces viruelas! ¡cuál los dientes  
 negrean por los males y los años!   
 

 Mírate en el espejo un solo instante   
 y dime si tus modos insolentes   
 me harán fuerza con tantos desengaños.