A una dama que cenó con el autor

A una dama que cenó con el autor
de José Marchena


 Dase Dios por manjar a su escogido   
 pueblo en la pascua cena misteriosa;   
 Cristo es comida y mesa deliciosa   
 del hombre de amor tanto confundido.   
 

 Jesús asiste en gloria y prez ceñido  
 eternamente con su amada Esposa;   
 ¡de amor omnipotente portentosa   
 hazaña! En tierra mora, al Cielo es ido.   
 

 Tú que por diosa adora el alma mía,   
 bellísima Amarilis, a ti es dado  
 hacer tan gran milagro nuevamente.   
 

 Cristo se ha dado a sí en la Eucaristía:   
 ¡ay! tú date a mi pecho enamorado,   
 y vivirás en él eternamente.