A los ferrocarriles

A los ferrocarriles
de Juan Nicasio Gallego


 Más quiero estar rollizo como un sollo   
 sin montar en borrico ni en caballo,   
 que andar diez leguas mientras canta un gallo   
 metido en un cajón hecho un repollo.   
 

 Tengo presente aquel fatal embrollo  
 que en Versalles pasó y otros que callo:   
 de aquí no he de moverme aunque eche tallo:   
 un hijo mío no ha de ser criollo.   
 

 En un ferrocarril sálvese un pillo   
 que a una doncella deshojó el capullo,  
 o de alguna prisión forzó el rastrillo;   
 

 que yo prefiero al plácido murmullo   
 de un arroyo roncar como un chiquillo,   
 y llámenme, si quieren, Pero Grullo.