A la pereza (Poesías, 1839)

Véase también: A la pereza
A la pereza
de Manuel Bretón de los Herreros


 ¡Qué dulce es una cama regalada!   
 ¡Qué necio el que madruga con la aurora   
 aunque las musas digan que enamora   
 oír cantar a un ave en la alborada!   
 

 ¡Oh, qué lindo en poltrona dilatada  
 reposar una hora y otra hora!   
 Comer, holgar..., ¡qué vida encantadora,   
 sin ser de nadie y sin pensar en nada!   
 

 ¡Salve, oh, Pereza! En tu macizo templo   
 ya, tendido a la larga, me acomodo.   
 De tus graves alumnos el ejemplo   
 

 arrastro bostezando: y en tal modo   
 tu apacible modorra a entrar me empieza   
 que no acabo el soneto... de per... (eza)