Página:Plagiado (1896).djvu/117

Esta página no ha sido corregida
109
DONDE SE HABLA DEL "ZORRO ROJO"

Macrobs (pues todos estos son nombres de mi partido, David) y entonces Ardiel tendría que pedir limosna por la calle.

DONDE SE HABLA DEL ZORRO ROJO"—Bien,—pregunté,—¿y qué hubo ?

Alán dejó su pipa de fumar sobre la mesa, y se puso ambas manos sobre las rodillas.

—Vd. nunca lo adivinaría, contestó.—Estos mismos Stuarts, Maccolls y Macrobs, que tenían que pagar dos rentas, una al Rey Jorge por fuerza mayor, y la otra á Ardiel, movidos de su afecto, le ofrecieron un precio más subido que ningún Campobello en toda Escocia, y eso que aró la tierra y el mar para conseguirlo.

—Bien, Alán,—le dije,—esa es una historia singular y excelente. Y á pesar de que tal vez sea yo un Whig, me alegro que ese hombre haya sido derrotado.

—; Derrotado?—exclamó Alán.—Ya veo cuán poco conoce Vd. á los Campobellos y mucho menos al Zorro Rojo. Derrotado? No: ni lo será hasta que su sangre i riegue la tierra. Pero si llegare el día, amigo David, en que yo pueda hallar tiempo y oportunidad para dedicarme un poco á la caza, no habrá bosques bastante espesos en Escocia lo oculten á mi venganzaque —Amigo Alán,—le dije.—No procede Vd. como hombre cuerdo ni como cristiano en desfogar su cólera de modo tal, que ni le hará daño alguno al Zorro Rojo ni bien alguno á Vd. Continúe con su historia.

—Esa es una buena observación,—David.—Es verdad que mis palabras no le harán, por desgracia, mal alguno.

Y dejando á un lado lo de no ser muy cristiano mi deseo (en lo cual soy de opinión contraria á Vd.), en lo demás tiene mucha razón.