Página:Las vidas paralelas de Plutarco - Tomo IV (1880).pdf/71

Esta página no ha sido corregida
73
ALEJANDRO.

adelantó con la caballería unos veinte estadios, haciendo cuenta que si los enemigos acometiesen con esta arma, mejor los venceria; y si quisiesen mover su batalla, tambien le llegaria á él con anticipacion su infantería, y sucedió lo primero: porque habiendo cargado á mil caballos y sesenta carros, los puso en huida, habiendo tomado todos los carros, y muerto trescientos hombres. Entendió con esto Poro que el mismo Alejandro estaba ya de aquel lado; por lo que movió con todo su ejército, á excepcion de algunas tropas que fué preciso dejar para que estorbaran el paso á los Macedonios. Alejandro por temor de los elefantes y del gran número de los enemigos dice que cargó oblicuamente por el ala izquierda, dando órden á Coino de que acometiese por la derecha; que por una y otra fueron los enemigos rechazados, y retirándose siempre hacia los elefantes, los que iban de vencida, allí se embarazaban y confundian; y que trabado el combate al salir el sol, con dificultad á la bora octava cedieron los enemigos. Esto es lo que el mismo ordenador de esta batalla refirió en sus cartas. Los más de los historiadores convienen en que Poro sobrepujaba la estatura ordinaria en cuatro codos y un palmo, y que á caballo nada le faltaba para quedar igual con el elefante por la talla y robustez de su cuerpo; y eso que el tal elefante de que usaba era de los más grandes; el cual manifestó en esta ocasion una extraordinaria inteligencia y sumo cuidado del Rey: pues mientras éste se sostuvo con vigor, le defendió encolerizado de los que le acometian, haciéndolos pedazos; mas cuando percibió que desfallecia por el gran número de dardos y heridas, temeroso de que cayese de golpe, se inclinó blandamente al suelo doblando las rodillas, y cogiendo despues suavemente con la trompa los dardos, se los fué sacando de uno en uno. Preguntaudo Alejandro á Poro, cuando ya quedó cautivo, cómo queria le tratase: «régiamente,» le respondió; y replicándole Alejandro si no tenía más que añadir: