y las armas á sus enemigos exteriores, mientras en lo interior duraban mal extinguidas las centellas de discordia civil: fueron causas capaces de retardar en aquel pais los progresos de la ilustracion, y por consiguiente los del teatro.
Pueden reducirse á tres clases las piezas que entonces se representaban en Inglaterra: Misterios, Moralidades y Farsas. Los Misterios no eran otra cosa que unos dramas donde se ponian en accion los hechos del viejo y nuevo Testamento, y aún se conservan en el Museo Británico los que se dice fueron representados en el año de 1600 intitulados: La caida de Luzbel. La Creacion del Mundo. El Diluvio. La Adoracion de los Reyes. La Degollacion de los inocentes. La Cena. La Pasion.
El Antechristo. El Juicio final, y otros por el mismo gusto. En estas compo-