La muerte es la vida

Nota: Se respeta la ortografía original de la época

II.
La muerte es la vida.

Esto que vive en mí, por quien yo vivo,
Es la mente inmortal de Dios, criada
Para que, en su principio transformada,
Anhele al fin de quien el sér recibo.
Mas del cuerpo mortal al peso esquivo,
El alma en un letargo sepultada,
Es mi sér en esfera limitada,
De vil materia misero cautivo.
En decreto infalible se prescribe
Que al golpe justo que su lazo hicre,
De la cadena terrenal me prive.
Luégo con fácil conclusion se infiere
Que muere el alma cuando el hombre vive,
Que vive el alma cuando el hombre muere.