Historia XVII:Polonia

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Polonia tenía entonces territorio más grande que ningún otro Estado de Europa, llegando desde el Báltico al mar Negro. Estaba formada por la reunión de dos Estados, el reino de Polonia y el Gran Principado de Lituania.

Los polacos, pueblo eslavo y católico, ocupaban al occidente las grandes llanuras del Wartha y del Vístula hasta los Cárpatos. Habían conquistado al Norte la Prusia, poblada en parte por alemanes luteranos, — al este el reino de Galitzia, habitado por rusos ortodoxos, los rutenos,— al Sudeste las grandes llanuras, que formaban la Pequeña Rusia, habitada por un pueblo ruso ortodoxo.

Los lituanos, establecidos al Norte en el país de grandes selvas que se extiende hasta el Báltico, eran un antiguo pueblo que había conservado su lengua al hacerse católico. Pero los señores lituanos habían adoptado el traje y la lengua de los polacos. Los lituanos habían conquistado al Este el país de selvas y de pantanos llamado Rusia blanca, habitado por un pueblo ruso y ortodoxo.

Los nobles eran más numerosos en Polonia que en ningún otro país de Europa, porque todos los guerreros eran nobles y servían a caballo. Tenían el monopolio de todos los empleos y todas las propiedades. Los aldeanos estaban sometidos a los nobles, como los siervos de la Edad Media en Francia.

En 1573 se había extinguido la familia real, y desde entonces el rey de Polonia era elegido por los nobles. Se reunían a caballo en una gran llanura, y, antes de elegir al rey, le imponían un tratado, los pacta conventa. El rey se comprometía a no hacer nada sin el consentimiento del Senado, formado por grandes señores de Polonia y de Lituania. No tenía ya más facultad que la de nombrar los grandes dignatarios. Una vez nombrados, estos dignatarios permanecían en funciones toda su vida y eran los verdaderos dueños del gobierno.

Los reyes fueron casi todos príncipes extranjeros, primero Enrique de Valois, que llegó a ser el rey de Francia Enrique III, luego un príncipe de Transilvania, más tarde un sueco.

La Dieta, que se reunía una vez cada dos años, se componía de dos Cámaras. Una era el Senado, constituido por grandes señores; —la otra, la Asamblea de los diputados (nuncios), que enviaban los nobles de cada distrito. Se estableció la costumbre de que la Dieta no pudiera adoptar ninguna resolución sino por unanimidad. Bastaba un solo diputado para impedir que votasen todos los demás. Era lo que se llamaba el liberum veto.

Muchos nobles polacos, en el siglo XVI, se habían hecho protestantes. Pero los reyes siguieron siendo católicos. Mandaron llamar jesuitas y no quisieron nombrar protestantes para ningún cargo. Poco a poco todos los nobles se educaron en los colegios de jesuitas y no quedaron más que católicos.

En las provincias orientales, los habitantes eran rusos y de religión ortodoxa. Los polacos quisieron hacerles entrar en la Iglesia católica. Se pusieron de acuerdo con algunos obispos ortodoxos que aceptaron la Unión (1595). Parte de los rusos ortodoxos reconocieron el poder del Papa y entraron en la comunión de la Iglesia católica; pero conservaron su culto en vieja lengua eslavona y siguieron teniendo sacerdotes casados. Se les llamó Griegos unidos.

Pero la mayor parte de los ortodoxos no aceptaron la Unión, y se alzaron contra los sacerdotes católicos. Hubo motines y hasta matanzas, en el Sur, en la Pequeña Rusia.